Audiencia Nacional

Marjaliza incrimina a una diputada de C’S a la que pagó 30.000 euros

El cabecilla de la trama declaró al juez que le regaló viajes a cambio de su voto

David Marjaliza, el pasado 30 de diciembre, a su salida de la cárcel de Aranjuez (Madrid) tras pasar 14 meses en prisión
David Marjaliza, el pasado 30 de diciembre, a su salida de la cárcel de Aranjuez (Madrid) tras pasar 14 meses en prisiónlarazon

El empresario David Marjaliza, presunto «cerebro» del «caso Púnica», incriminó en su declaración ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco a la número tres de Ciudadanos en Madrid, Eva Borox, al afirmar que le pagó 30.000 euros procedentes de la supuesta trama corrupta y varios viajes, a cambio de su voto a favor de la construcción de un colegio concertado en Valdemoro, cuando ella era concejal del PSOE en el municipio.

El programa «Al Rojo Vivo», de la Sexta Noticias, desveló ayer que el socio de Francisco Granados, el empresario David Marjaliza, mantenía una relación «estrecha» con Borox, a la cual invitó junto a su marido a varios viajes por la geografía española, como a Andorra en los años 1998 y 1999, Palma de Mallorca en agosto de 2005, Murcia en el año 2002, Denia en julio de 2003 y 2004, Almería en agosto de 2000 y 2001, entre otros, según desvela el sumario de la trama.

Sin embargo, la ahora diputada de Ciudadanos negó esta información, explicando que Marjaliza «no necesitaba» su apoyo para la construcción del colegio porque el Partido Popular «tenía la mayoría absoluta». Asimismo, también negó la relación con Marjaliza, afirmando que sólo era un «vecino» al que conocía desde «hace tiempo».

De hecho, ella misma lo negó a través de un comunicado difundido por la formación naranja. «Niego la veracidad de todas las acusaciones recogidas en la declaración judicial de David Marjaliza durante mi etapa como concejal del PSOE», a lo que añadía que el imputado «nunca» le había pagado «ningún viaje» ni tampoco «comisión alguna».

Cuando el caso salpicó a la diputada de Ciudadanos en el mes de julio del año pasado, ésta aseguró que se trataba de una mentira «absoluta, asquerosa y repugnante», al igual que rechazó cualquier vinculación con el «caso Púnica» y afirmó que renunciaría a su cargo si fuese imputada. Por su parte, el portavoz de Ciudadanos en la Comisión de Corrupción, César Zafra, explicó que su formación no va a entrar a valorar «relaciones y posibles amistades», pero recalcó que si la diputada fuera investigada «tendría que dejar el acta», tal y como recogen sus estatutos. Además, hizo hincapié en que C’s han sido y son «muy contundentes» con este tipo de casos, informa Ep.