Delito fiscal

Miquel Roca: «Pidieron tres millones para retirar la acusación a la Infanta»

Encabeza el equipo de abogados que se encarga de la defensa de la Infanta.. Tras conocerse la noticia de las detenciones en la cúpula de Manos Limpias, relató ayer en exclusiva a LA RAZÓN los detalles del chantaje que intentó el sindicato que acusa a Doña Cristina.

Miguel Roca encabeza el equipo de abogados que se encarga de la defensa de la Infanta Cristina
Miguel Roca encabeza el equipo de abogados que se encarga de la defensa de la Infanta Cristinalarazon

Encabeza el equipo de abogados que se encarga de la defensa de la Infanta. Tras conocerse la noticia de las detenciones en la cúpula de Manos Limpias, relató ayer en exclusiva a LA RAZÓN los detalles del chantaje que intentó el sindicato que acusa a Doña Cristina.

La noticia de las detenciones de Miguel Bernal, Luis Pineda y otros responsables de Manos Limpias y Ausbanc, cogía ayer a Miquel Roca, abogado de la Infanta Cristina, en Barcelona.

–¿Le han sorprendido las detenciones de los responsables de Manos Limpias y Ausbanc?

–La sorpresa sobre la detención sí, porque lógicamente yo no estaba informado de que esto fuera a pasar. Que había algunos comportamientos que despertaban en algún momento interrogantes, eso es otra cuestión, pero en eso no me puedo meter. Había recelos sobre las motivaciones reales de esta gente.

–¿Manos Limpias intentó chantajearlos? ¿Podemos usar esta última palabra?

–Lo que puedo decir es lo siguiente. En un momento determinado, hace muy poco tiempo, hará un mes justo, una persona que se atribuía la representación de Manos Limpias intentó entrevistarse conmigo y me negué. Por la vía de un conocido, le trasladó la posibilidad de buscar una solución que obviamente tenía un coste, porque habían existido gastos procesales. A partir de ese momento dije que no quería seguir, ni escuchar nada de este tema y, además, comuniqué esta conversación de terceros a la Policía. Ésa ha sido nuestra actuación y lo seguiremos haciendo siempre así. Para mí solamente existe una vía correcta de actuación, que es la judicial. Todo lo que sea al margen de la Justicia será lógicamente rechazado y, si es necesario, se comunicará a las autoridades.

–¿Quién era esta persona que hablaba en nombre de Manos Limpias?

–Algo que está sometido a la investigación de los juzgados ya saldrá en las actuaciones. No quiero decirlo, ni me parece correcto decirlo porque está el secreto profesional y el de la investigación.

–¿Es verdad que Manos Limpias les pedía una cantidad de 3 millones de euros?

–La verdad es que, según se me explica, se habló de 3 millones de euros. No se decía nada más. Se entendía que podía ser esta cifra.

–¿Se les dijo quién tenía que pagar esta cantidad, si eran ustedes o su representada?

–No se siguió la conversación. Cuando se llegó a este punto, la persona que estaba allí les dijo que no nos interesaba nada. Al comunicármelo, dije que había hecho muy bien, que nada de nada, y que nos íbamos a ver a la Policía para contarlo todo.

–¿Ustedes han presentado una denuncia ante la Policía por los hechos que me ha narrado?

–No. Ha habido una conversación entre terceros que a mí me plantea dudas sobre cuál es la finalidad y su contenido. Con un tema tan delicado como nos han confiado, yo no me siento cómodo guardándome esto para mí. Yo explico lo que ha pasado y serán la Justicia y la Policía quienes valorarán qué calificación debe darse a estos hechos.

–¿Todo esto puede afectar al proceso judicial que tiene lugar en estos momentos en los juzgados de Palma de Mallorca?

–Sí, lógicamente podría afectar al proceso, pero no lo deseo. Lo que quiero es que todo esto acabe reconociendo la absolución, reconociendo la inocencia de mi representada. Será el propio Tribunal quien lo decida. Lo que deseamos es una resolución judicial que reconozca la inocencia de nuestra patrocinada.

–Usted siempre ha dicho que quieren una sentencia judicial, no un acuerdo extrajudicial.

–Exactamente. No quiero ningún acuerdo. Si se me plantea una idea de resolución extrajudicial, no solamente será rechazada inmediatamente, sino que si es necesario se le comunicará a quien corresponda. Quiero que se resuelva por vía judicial.

–¿Cuál cree que ha sido la finalidad de Manos Limpias en este caso?

–Mire, hay un secreto de actuaciones, pero usted sabe que la operación no se ha hecho por este caso, sino, como se dice, por otros diversos casos. Me entristece y hasta me duele que esta situación se produzca porque no es buena. Entre todos debemos respetar la Administración de Justicia y respetar quiere decir acusar con fundamento.

–¿Ha podido hablar con su representada sobre todo este tema?

–Sí, muy brevemente. Como es lógico le ha generado mucha estupefacción por parte de la interesada. Le he informado de lo que ha pasado.

–¿Ella se ha sorprendido cuando habló con usted? ¿Qué le ha comunicado?

–Sí, le ha sorprendido el hecho. Otra cosa son las valoraciones que cada uno pueda tener íntimamente sobre si se podía esperar o no, pero sí, le ha sorprendido y a mí me ha entristecido y dolido.

–¿Qué puede pasar a partir de ahora?

–No lo sé. Esto lo decidirá el tribunal. Ahora hay dos escenarios. Por un lado, está el de las investigaciones que se están haciendo como producto de estas detenciones y, por otra parte, el escenario del juicio que afecta a la Infanta. Se verá en los próximos días y sabremos si el tribunal debe tomar alguna decisión o todo debe continuar. En todo caso, nosotros estamos preparados para seguir cada día porque todavía quedan testimonios y mis compañeros abogados estarán presentes para hacer las preguntas necesarias. Por nuestra parte, seguiremos el juicio con total normalidad.

–A un nivel personal, ¿se siente ahora más optimista respecto a la absolución de su representada en este proceso?

–Con toda sinceridad, siempre me he sentido optimista. Llevamos muchos días de juicio y no ha habido ni un solo testimonio, ni uno solo, que haya dicho nada contra la Infanta. Ni uno. Y eso que va pasando gente a declarar, pero no hay nada, ni una acusación contra la Infanta. Es que es un tema que no se aguanta. Por tanto, siempre me he sentido optimista. Ahora, si me permite, me siento más necesitado que nunca del reconocimiento de inocencia, algo que busco.