Caso Manos Limpias

Pineda, al juez: «Si hay algún culpable, soy yo»

El presidente de Ausbanc desvincula el millón que cobró de Unicaja de la retirada de la acusación contra su presidente en el «caso de los ERE»

Luis Pineda, el pasado 15 de abril, detenido en la «operación Nelson»
Luis Pineda, el pasado 15 de abril, detenido en la «operación Nelson»larazon

El presidente de Ausbanc desvincula el millón que cobró de Unicaja de la retirada de la acusación contra su presidente en el «caso de los ERE».

El presidente de Ausbanc, Luis Pineda, negó al juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz que el millón de euros que percibió en diversos pagos la asociación de usuarios de banca de Unicaja el pasado febrero fuera una contraprestación por retirar la acusación que mantenía Manos Limpias contra el presidente de la entidad, Braulio Medel, en el «caso de los ERE». Así se lo explicó al magistrado y al fiscal Daniel Campos el pasado día 18, horas antes de que Pedraz acordara su ingreso en prisión por liderar supuestamente una organización criminal dedicada a extorsionar a los objetivos de sus denuncias.

«¿Tiene algo que ver –le preguntó el fiscal– que en esos mismos días en que se retiró la acusación al señor Medel Unicaja hiciese unos pagos a Ausbanc?». El investigado negó la mayor y vinculó esos cobros «con los procedimientos que seguimos por las cláusulas suelo». Pineda se refirió en particular a un procedimiento emprendido por la asociación en León. «Pues es posible –afirma–, porque echando cuentas de lo que ha costado ese procedimiento, ruedas de prensa, estudios, durado años, porque además en León no tenemos oficina y cada vez que íbamos ahí teníamos que hacer desplazamientos importantes...».

Pineda dijo que era «el máximo responsable» de Ausbanc «en todos los sentidos». «Si hay algún culpable, soy yo», llegó a decir antes de explicar al juez que su asociación se financia con las cuotas que pagan su alrededor de 10.000 socios.

El investigado definió su relación con Miguel Bernad, secretario general de Manos Limpias –el sindicato que según el juez Pedraz utilizaba para «reforzar» sus coacciones– como un «pacto de caballeros» y contó que, tras conocerse a raíz del procedimiento abierto contra el ex presidente de Caja Madrid Miguel Blesa, le ofreció contratar los servicios jurídicos de Ausbanc a cambio de nada. «Cuando haya algo de banca, te puedo ayudar», le sugirió.

En el «caso de los ERE», según su versión, se involucró a petición de Unicaja y tras convencerse de la inocencia de Medel, por lo que habló con el abogado de Manos Limpias, que finalmente retiró la acusación contra el dirigente de la entidad.

Pineda –que alardeó de sus contactos con la cúpula bancaria e intentó enumerar los logros de Ausbanc hasta que el juez le cortó en seco– negó también que el tratamiento que daba a las entidades en sus publicaciones dependiera de sus inversiones publicitarias. En un momento del interrogatorio, pidió un vaso de agua porque, se excusó, «llevo cuatro días sin ver el sol por demandas a los bancos».