Podemos
Podemos sólo logra 7.700 de los 28.435 euros que pidió para «echar a la casta»
La formación de Iglesias sólo consigue 7.636 euros de los 28.435 que se proponía como objetivo. Llevan un mes pidiendo dinero para financiar la marcha de la Puerta del Sol. En su guía de participación ya preveían «completar la parte que falte» con otros recursos del partido
La formación de Iglesias sólo consigue 7.636 euros de los 28.435 que se proponía como objetivo. Llevan un mes pidiendo dinero para financiar la marcha de la Puerta del Sol. En su guía de participación ya preveían «completar la parte que falte» con otros recursos del partido
A pesar de llevar más de un mes de propaganda de «La marcha del cambio» que tendrá lugar hoy en Madrid, de los vídeos promocionales y de la intensa campaña en las redes sociales, Podemos no ha conseguido obtener hasta el momento ni un tercio del dinero que se puso como objetivo para financiar el 31-E. Al cierre de esta edición, la campaña de «crowdfunding» –sistema de financiación que se nutre de pequeñas donaciones de particulares– tan sólo había conseguido recaudar el 27% del objetivo planteado, unos 7.700 euros gracias a más de 660 aportaciones, cuando se habían propuesto como objetivo 28.435 euros. Y eso que en apenas dos días ha logrado conseguir casi la mitad de lo recaudado, porque el martes apenas alcanzaban los 4.601 euros.
Según la página web abierta para la marcha, la formación que lidera Pablo Iglesias necesitaba para costear la marcha 11.000 euros para cartelerías y envíos; 9.000 euros para el escenario, sonido, electrógenos, cableados y personal; otros 1.000 para lonas y pancartas y 2.500 euros para presupuesto a lo largo del recorrido, que suman 23.500 euros, a los que hay que añadir el IVA correspondiente, por lo que la cifra total ascendía a 28.435 euros. No obstante, la campaña de micromecenazgo no acaba con la marcha que hoy recorrerá la calle Alcalá desde la Plaza de Cibeles desde las 12:00 horas, ya que Podemos ha extendido el plazo para donar una semana más. Aun así, todo indica que no conseguirá financiar por completo su manifestación para «echar a la casta», y que tendrá que completar lo que falta con dinero del partido, una posibilidad que se recoge en la propia guía de participación. «En el caso de que el crowdfunding no se haya completado, pero se haya llegado cerca y se aprecie un esfuerzo de publicidad y difusión, procederemos a completar la parte que falte», se explica en el apartado cuatro relativo a los Círculos y Consejos Ciudadanos.
La formación emergente ha tratado de impulsar mensajes como «el cambio ha empezado» o «juntos podemos», más alejados del radicalismo del que se le acusa, pero al final el eje de la manifestación será el de «echar a la casta» y mostrar que «el cambio es posible». No faltará ninguno de los pesos pesados de la formación. Íñigo Errejón intervendrá al inicio; Pablo Echenique o Carolina Bescansa estarán muy visibles y tampoco faltará Juan Carlos Monedero, al que la Universidad Complutense y el Ministerio de Hacienda investigan por el cobro de 425.000 euros por asesorar a Nicaragua, Bolivia, Ecuador y Venezuela por labores de asesoramiento para implementar una moneda única bolivariana. Precisamente el número tres de Podemos será el encargado de cerrar en la Puerta del Sol un acto que abrirá el discurso del secretario general, Pablo Iglesias.
Cuatro años después del 15-M
El espíritu, las reivindicaciones, los mensajes y, sobre todo, el lugar escogido, hacen inevitables las comparaciones con aquel 15-M que «ocupó» la Puerta del Sol hace casi cuatro años. «No es tiempo de etiquetas ni de formas viejas de hacer política: es tiempo de protagonismo ciudadano», reza otro de los lemas para el acto. Según Podemos, tampoco se trata de la movilización de un partido político, sino la de toda la gente «que se ha sentido maltratada», incluso de aquellos militantes del PSOE y del PP que se han sentido «defraudados», a los que la formación «morada» invita a acudir a la marcha. Beatriz Talegón, secretario general de la Unión Internacional de Juventudes Socialista ha anunciado su participación en la marcha. «A nadie se le pide ningún carné», defendió ayer el número dos, Íñigo Errejón. Pero no todo son apoyos. Las bases ya mostraron su rechazo a una manifestación convocada por el secretario general sin previo aviso. Y se ha criticado un claro mensaje reivindicativo de una marcha que el equipo de Iglesias ha programado para mostrar músculo de cara a las próximas citas electorales que se celebrarán en 2015.
Blablacar casero y viviendas particulares de acogida
Para su gran manifestación, Podemos no sólo ha pedido la financiación ciudadana. También se ha montado su propio Blablacar –conocido sistema para compartir vehículo entre ciudadanos–. Según informa Podemos, cerca de un centenar de particulares han ofrecido su coche personal para el desplazamiento a la capital con este sistema de compartir coche, ofertando así 224 plazas adicionales a los 260 autobuses desplazados para la ocasión. «Vamos a demostrar en Madrid que 2015 puede ser el año de la ciudadanía, el año del cambio político en España, el año de la ilusión», reza uno de los lemas de la manifestación. Y no se puede decir que los ciudadanos no hayan contribuido. Porque a esta iniciativa hay que añadir otra muy similar, en este caso relativa a la vivienda. Para todos aquellos que se desplacen por su cuenta o en los anteriormente citados vehículos compartidos, Podemos ha promovido la acogida de participantes en casas particulares de la ciudad. En torno a 500 personas han respondido a esta petición, con lo que se han conseguido más de 1.200 plazas disponibles para quien se desplace desde otras comunidades.
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