PSOE y Cs negocian un acuerdo en Murcia que vulnera el Estatuto

Los contactos entre PSOE y Ciudadanos al más alto nivel no cesan en plena crisis de Murcia. A la comunicación constante que existe entre el portavoz de la gestora, Mario Jiménez, y el secretario general de la formación naranja, José Manuel Villegas, se suma ahora la reunión que tendrá lugar hoy entre Javier Fernández –ejerciendo como presidente de Asturias, aunque también lo es de la dirección interina socialista– y el presidente de Cs, Albert Rivera. La cita surge a iniciativa del líder de Ciudadanos, coincidiendo con una visita al Parlamento asturiano, y –aunque ambas partes destacan el carácter institucional de la misma– ésta se enmarca en plenas negociaciones de sus formaciones en Murcia para intentar llegar a un acuerdo sobre la moción de censura presentada por el PSOE para desbancar a su presidente, Pedro Antonio Sánchez.

De hecho, ambos partidos se reunieron ayer para acercar posturas y tal como adelantó LA RAZÓN sobre la mesa se puso la posibilidad de articular un gobierno «plural», de «perfil técnico», conformado por «independientes», de manera que no sea necesaria la convivencia de Ciudadanos y Podemos dentro del Ejecutivo murciano. En el encuentro, Ciudadanos moduló su exigencia de elecciones inmediatas, postergándolas seis meses, una condición que el PSOE estudiará y aceptaría a cambio de que se asegure una legislatura de cuatro años –y no sólo de los dos que restan ahora– para lo que sería necesario, a su vez, reformar el Estatuto de Autonomía de Murcia. Sin embargo, en esta negociación existe una trampa, ya que el propio Estatuto de Autonomía de la región, en su artículo 27, establece que no se podrá acordar la disolución de la Asamblea Regional, «con anticipación al término natural de la legislatura», «antes de que transcurra el plazo de un año desde la última disolución por una moción de censura». Por lo que el candidato socialista tendría que estar al menos un año en el poder, un periodo que podría ampliarse hasta que se dé luz verde, en trámite parlamentario, a la reforma del citado estatuto.

La formación naranja también pretende que, a cambio de apoyar la moción de censura del PSOE, se respeten las enmiendas que ha presentado a los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para el 2017 y establecieron como requisito «innegociable» que se excluya a Podemos del eventual gobierno liderado por el socialista Rafael Gónzalez Tovar. El candidato del PSOE aceptó las enmiendas presupuestarias, pero puntualizó que en la reunión no se había hablado de la composición del futuro Ejecutivo. Los socialistas son partidarios de optar por la fórmula de un gobierno en solitario, apoyado desde fuera por Podemos y Cs, a través de pactos de gobierno sobre determinadas materias y acuerdos puntuales posteriores. En el PSOE apremian a Ciudadanos a tomar una decisión cuanto antes, «sólo quedan seis días– y volverán a reunirse con la formación naranja en los próximos días. Hoy harán lo propio con los representantes de Podemos en la región.