Rajoy, dispuesto a ir al Congreso, pero no a un Pleno sólo de Bárcenas

La posible comparecencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Congreso para hablar del «caso Bárcenas» sigue monopolizando la agenda política. Como ayer informó este periódico, el presidente valora cómo concretar esa comparecencia y cuándo hacerlo. Rajoy no quiere que la figura del ex tesorero monopolice un Pleno extraordinario sin otro asunto en su orden del día porque «supondría tanto como darle poder para marcar la agenda política y parlamentaria», según explican desde su entorno.

En Moncloa siguen estudiando una posible salida, por ejemplo más enfocada hacia su paquete de reformas para la regeneración democrática, que desbloquee la situación y que sirva, además, para devolver la pelota al tejado socialista. Al margen de las posibilidades que están estudiando en la dirección parlamentaria y desde la Secretaría de Relaciones con las Cortes, que dirige José Luis Ayllón, en Moncloa precisaban ayer tarde que todo seguía abierto.

El Grupo Popular tiene hasta el lunes a las ocho de la tarde para cerrar su postura, que dependerá de la decisión final de Rajoy. A esa hora termina el plazo para las solicitudes que pueden entrar en la Diputación Permanente del 24 de julio, y, por tanto, el plazo para que los populares presenten una solicitud de petición propia de comparecencia del presidente. Si no prospera la exigencia de explicaciones, el PSOE materializará su amenaza y presentará una moción de censura. Al menos así lo ha anunciado y es la posición que sigue sosteniendo, pese a las dudas internas, que las hay. Los socialistas insistieron ayer en que no les vale una sesión de control en la que el presidente se someta sólo a las tres preguntas que le hace la oposición. En el plano del debate político, el vicesecretario general de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons, aseguró ayer que Rajoy acudirá al Parlamento para hablar sobre el «caso Bárcenas» cuando «lo obligue la política, y no cuando le obliguen Rubalcaba y Bárcenas».

Por otra parte, la ponencia de la Ley de Transparencia tenía previsto concluir ayer sus trabajos, pero no pudo hacerlo por el boicot de la oposición a cuenta del escándalo Bárcenas. Volverá a reunirse el jueves, un día después de que la Diputación Permanente decida si Rajoy comparece. El Gobierno desvincula esa fecha del resultado de la Diputación. El presidente también estudia hacer un balance del curso político antes de las vacaciones de agosto.