Rajoy reúne a todos sus cargos para impulsar la movilización electoral

Tal y como adelantó ayer LA RAZÓN, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha convocado a los integrantes de la Junta Directiva Nacional del PP el próximo día 7, tras el paréntesis de la Semana Santa, para analizar la estrategia y perspectivas del partido ante el periodo electoral que tiene por delante.

El próximo martes el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, presidirá la Junta Directiva Nacional del PP. Es el máximo órgano entre Congresos del partido y, según los Estatutos, la integran los miembros del Comité Ejecutivo Nacional, los diputados, senadores, parlamentarios europeos, los presidentes autonómicos, provinciales e insulares, los alcaldes de las capitales autonómicas, de provincia y de municipio, y otros cargos de la formación. Rajoy toma así la iniciativa para espolear a los suyos e impulsar la movilización de todo el partido ante las elecciones autonómicas y municipales del mes de mayo. En las que, según los sondeos internos que manejan en estos momentos, el PP se juega perder o mantener bastantes mayorías absolutas que ahora posee y, en consecuencia, importantes Gobiernos autonómicos y alcaldías.

Sus encuestas les confirman que la mayoría absoluta va a estar cara en estos comicios y que de esas elecciones pueden salir muchos gobiernos en minoría, en los que el PP sea la fuerza más votada, pero que queden en manos de los posibles acuerdos postelectorales. Del PSOE con Podemos o Ciudadanos o, en lo que a ellos afecta, si acaso con Ciudadanos, un escenario al que ya empiezan a dejar la puerta abierta. Ayer lo hizo con bastante claridad el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, quien en una entrevista en Efe admitió que «quizá» fue un error «no considerar o despreciar al adversario», en referencia a Ciudadanos, y destacó que si el partido de Albert Rivera «quiere jugar en el centro político», el PP tendrá «capacidad de encuentro con ellos». Alonso también se mostró partidario de hacer «autocrítica todos los días», a la vez que precisó que en el caso de Podemos, «una cosa es la demoscopia y otra la democracia».

Después de los malos resultados electorales de Andalucía, y ante el nuevo tablero político en el que la entrada de los partidos emergentes pone más difícil alcanzar el porcentaje de voto necesario para conseguir mayorías absolutas, Rajoy mueve ficha convocando a varios centenares de cargos nacionales y locales populares. El objetivo es movilizar a los suyos, pero también hacer un gesto de unidad para hacer frente al desafío electoral. A partir de las andaluzas, y en un clima de intensa preocupación territorial por la cita de mayo, desde dentro se han aireado en los últimos días informaciones interesadas de unos contra otros, que incluso han apuntado contra el propio presidente del Gobierno. Esta convocatoria de la Junta Directiva Nacional es la primera que se celebra en dos años, ya que la última tuvo lugar el 3 de abril de 2013, en plena ebullición del «caso Bárcenas». La anterior Junta Directiva se celebró en Sevilla seis meses después de que Rajoy llegara a La Moncloa y se produjo en el contexto de los duros recortes aprobados por el Gobierno ante la presión de Bruselas por la desviación del déficit y bajo la urgencia de las dificultades extremas de financiación que afrontaba entonces España. Es habitual que el presidente utilice estas reuniones para hacer un discurso abierto a los medios de comunicación.

El orden del día de la Junta Directiva del martes estará monopolizado por las autonómicas y municipales. A partir del análisis de los resultados de Andalucía, y después de que Rajoy se haya mostrado dispuesto a «corregir» algunas cosas y a trabajar con más intensidad, el presidente utilizará este cónclave para marcar las claves de la estrategia electoral, con un mensaje en positivo, sin autocomplacencia, pero desde la confianza en que su partido volverá a ser la fuerza más votada en las municipales y que tiene al alcance mantener una importante cuota del poder histórico que hoy ostenta a nivel regional. Rajoy insistirá en el mensaje de la recuperación económica y llamará a su partido a vender con más eficacia y entusiasmo el porqué de las decisiones de su Gobierno y los frutos que éstas han empezado a dar.

Ayer, el vicesecretario general de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, defendió que el «mejor aval» electoral de su partido es Rajoy, porque «junto a todos los españoles nos está sacando de la crisis». Arenas apoyó su «participación intensa» en la campaña autonómica y municipal en un año que «es el más importante en décadas y en el que nos estamos jugando el modelo de Estado y la unidad de España». «¿Queremos que España se parezca a Venezuela y a Grecia o queremos una España al lado de Italia, Alemania, Francia y Reino Unido?», se preguntó, antes de reclamar un «ejercicio de responsabilidad y una reflexión profunda». Arenas instó al PP a «explicar lo que hemos hecho, que ha sido mucho» y a transmitir que «donde haya un gobernante local o autonómico del PP, todas las políticas irán orientadas a la creación de empleo».