Política

Sánchez buscará un pacto con Podemos y la abstención de PP y Cs

Achaca el bloqueo al «multipartidismo» y recupera el mensaje del miedo del 28-A al equiparar a los populares con Vox.

Sánchez buscará un pacto con Podemos y la abstención de PP y Cs
Sánchez buscará un pacto con Podemos y la abstención de PP y Cslarazon

Achaca el bloqueo al «multipartidismo» y recupera el mensaje del miedo del 28-A al equiparar a los populares con Vox.

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha recuperado uno principales ejes de su campaña de hace cinco meses: poner a Vox en la diana de sus ataques y asimilarlo al PP por los pactos territoriales con la extrema derecha que sostienen a los populares en el poder. En una entrevista en Antena 3, el candidato socialista criticó a la nueva versión de Pablo Casado, porque «no se puede ir de moderado y pactar con la ultraderecha» y afeó que los populares no hayan salido a la escena pública a «desmarcarse» de las recientes declaraciones de Vox como las de criminalizar al PSOE o a las 13 rosas, las «mujeres fusiladas por defender la libertad».

Los socialistas ya se valieron el 28-A de la irrupción de la extrema derecha para presentarse como la única opción de frenar esta amenaza. Pero la pujanza de los de Abascal no fue tanta como auguraban las encuestas y sus 24 diputados no fueron decisivos, lo que desdibujaba ahora este argumento para volver a movilizar a las huestes socialistas. Sin embargo, tras la exhibición de fuerza del pasado domingo en Vistalegre, Sánchez quiere azuzar de nuevo el miedo a Vox. «Vuelven a la carga para competir con el PP por los votos de quienes añoran el franquismo». El objetivo de Sánchez es llamar al electorado moderado y así animó a sus votantes en un acto en Madrid a «responderles con nuestros votos el próximo 10 de noviembre. Ya sabemos cómo respondían a los discrepantes cuando gobernaban sus añorados dirigentes», recordó.

Volviendo a la entrevista, Sánchez cuestionó en varios momentos el actual sistema multipartidista español. Una sopa de siglas que en dos ocasiones le ha perjudicado para formar Gobierno. «De qué sirven ocho, 50 o 100 partidos si después de las elecciones hay bloqueo», se preguntó Sánchez, que reiteró en un momento posterior que «si el multipartidismo solo sirve para el bloqueo, qué sentido tiene». En este sentido, Sánchez pidió tomar ejemplo de Portugal, donde se va a «facilitar el gobierno en base a una negociación programática». Hacia Unidas Podemos dedicó dos certeros dardos: «Tal como ellos entienden la coalición, es imposible», y criticó que utilicen «el trampantojo de la gran coalición» en campaña para acusar al PSOE de abandonar sus principios.

Estos principios han podido quedar tocados en la moción de censura a Torra, en la que el PSC no ha prestado su apoyo. Sánchez defendió que este movimiento «electoralista» de Ciudadanos ha servido para el efecto contrario que buscaba. Ha «fortalecido a quien está en el gobierno» dotándole de una mayoría que no ha tenido en toda la legislatura. El presidente no quiso desvelar si aplicará el 155 en Cataluña, una respuesta que será, en todo caso, «proporcional al desafío» y «unitaria» con el resto de partidos.