Los pedristas se diluyen sin líder

En una cumbre a la desesperada de los partidarios de Sánchez hubo grandes ausentes como Elorza o Luena.

Los críticos del PSOE se reunieron en Madrid en una cumbre en la que la primera noticia eran las ausencias y la segunda que sus propios partidarios siguen sin noticias de Pedro Sánchez, que no asistió porque ni siquiera se encontraba en Madrid. Sólo asistieron a la reunión a puerta cerrada los partidarios más acérrimos de Sánchez y aprobaron un documento en el que le apoyan como candidato. Sin embargo, el candidato no ha dicho esta boca es mía en los dos últimos dos meses, realizando sólo dos actos.

Este silencio de Sánchez, sus reticencias y dudas a dar un paso al frente, y algunos de sus planteamientos, han provocado un cisma en sus filas. Diversos dirigentes que manteniéndose críticos con la gestora y oponiéndose a Susana Díaz buscan una tercera vía que evite el enfrentamiento y, con seguridad, una derrota de los sectores críticos. La figura que emerge es Patxi López, que tampoco ha dado el paso.

Esta división en el sector sanchista aceleró la convocatoria de la reunión de ayer con la intención de cerrar filas en torno al ex secretario general y avalar su candidatura. Sin embargo, las ausencias fueron notables. No acudieron los pesos pesados de Sánchez, César Luena y Oscar López, ni uno de sus valedores más activos, el alcalde de Valladolid Oscar Puente, ni sus grandes apoyos territoriales, el catalán Miquel Iceta, la balear Francina Armengol, la vasca Idoia Mendia ni tampoco el vasco Odón Elorza. Asimismo, no acudió por motivos personales la diputada aragonesa Susana Sumelzo ni las diputadas Margarita Robles y Zaida Cantera, porque no son militantes socialistas.

La situación está cambiando en algunos territorios. Ayer no asisitió ningún dirigente socialista catalán «y el que esté, estará a título exclusivamente individual», afirmaron en el entorno de Miquel Iceta que hace valer la neutralidad del PSC en el proceso congresual del PSOE como trasladó a Javier Fernández, presidente de la gestora, y a la secretaria general del PSOE andaluza Susana Díaz.

La reunión fue tratada con una cierta distancia por parte de la Gestora. Su portavoz Mario Jiménez dijo que el acto había que interpretarlo con «normalidad y respeto». La ex presidenta del PSOE, Mikaela Navarro, fue más allá y afirmó que la reunión «no ayuda al partido». La reunión convocó a 68 dirigentes socialistas entre los que se encontraban los diputados José Luis Ábalos, Adriana Lastra, Sofía Hernanz y Rocío Frutos, los alcaldes de Dos Hermanas, Francisco Toscano, de Jun, José Antonio Rodriguez, y el de Calasparra, José Velez. Los ayer reunidos trataron de cerrar filas pidiendo a Sánchez que dispute la sectetaría general y cerrar el paso a los cada día más partidarios de la búsqueda de una tercera vía que supere el enfrentamiento que finalizó en la destitución de Sánchez. De momento, los críticos, mientras esperan candidato han aprobado un documento que defiende un PSOE más a la izquierda y más democrático. Los encargados de ofrecer la rueda de prensa fueron Adriana Lastra, José Luis Ábalos y Francisco Toscano. En la reunión participaron 68 militantes venidos de distintas comunidades de toda España. Explicaron que, «por su firmeza en su actitud», el mejor candidato sigue siendo el ex secretario socialista, «a pesar de lo traumático de lo vivido». Y aseguran que «hoy es mucho más líder que antes» para buena parte de la militancia. Respecto a la pregunta de cuál sería la alternativa a Sánchez por la que abogarían en caso de que finalmente éste rehusara presentarse, no quisieron posicionarse. Y aclararon: «No es un proyecto contra nadie, sino que la militancia está más cerca de la gente, y esto es lo que consideramos que debe ser el PSOE», informa A. G. Mateache.