Tensión

Sumar se desmarca del PSOE y pide que un ministro represente a España en la toma de posesión de México tras excluir al Rey

La líder de Podemos critica que el Gobierno respalde al Rey. "No es un Gobierno progresista" y en el socio minoritario ven un "mal ejemplo de diplomacia" exigir a México que inviten al Rey

MADRID, 10/05/2024.- El portavoz adjunto de Sumar, Enrique Santiago, ofrece una rueda de prensa tras registrar en solitario una proposición de ley para reactivar la derogación de la ley de seguridad ciudadana, conocida como ley mordaza, este viernes en el Congreso. EFE/ Fernando Alvarado
El portavoz de Sumar, Enrique SantiagoFERNANDO ALVARADOAgencia EFE

Sumar, socio del PSOE, abre un nuevo frente en Moncloa al distanciarse de la postura oficial defendida por la parte socialista del Gobierno este mismo miércoles a causa de la exclusión al Rey Felipe VI por parte de México en la toma de posesión de la presidenta electa de México, Claudia Seheinbaum. El Gobierno se ha plantado ante la actitud de México, la cual ha tachado de "inaceptable" y, por tanto, ha decidido no mandar a ningún representante gubernamental a la cita al entender que es "incomprensible" la decisión de México.

Ante esta decisión por parte del Ejecutivo de España, Sumar y Podemos han redoblado sus ataques contra la Monarquía e incluso han llegado a justificar que el Rey no sea invitado a México y a reclamar al Gobierno que un representante "electo" acuda al país.

Si bien desde el Ejecutivo defienden al jefe del Estado y recuerdan que es Felipe VI quien acude a las tomas de posesión de los presidentes iberoaméricanos, y es por eso, ante esa afrenta al Monarca, el motivo por el que no enviarán a nadie a la toma de posesión, desde la cuota minoritaria del Gobierno de coalición, protestan ante esta postura del Ejecutivo, y expresada por el ministerio de Asuntos Exteriores que dirige José Manuel Albares. "Otra vez comprobamos que la Monarquía es una anacrónica carga que nos da problemas cuando no ruboriza", expresó en sus redes sociales el diputado de Sumar y portavoz de IU en el Congreso de los Diputados, Enrique Santiago. "Mal ejemplo de diplomacia exigir al anfitrión de la fiesta a quien tiene que invitar a su casa", reaccionó en sus redes sociales, al entender que el Ejecutivo de España no puede exigir a México que invite al Rey Felipe VI. "España estaría muy bien representada por autoridades elegidas democráticamente", apuntilló.

El portavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados, Íñigo Errejón, marcó después la postura del grupo parlamentario, en la misma línea que Santiago. "La decisión de representación de España le pertenece al Ministerio de Exteriores. Nosotros la respetamos, pero el Gobierno de México es soberano para decidir a quien invita a la toma de posesión", dijo, en referencia al enfado de Moncloa por ser excluido Felipe VI. "En España debería abrirse el debate de que quien nos represente en el exterior sea un candidato electo", ha admitido, para marcar distancias así con la Monarquía.

También muy contundentes desde Podemos. La secretaria general del partido, Ione Belarra, ve lógico que no haya sido invitado el Rey Felipe VI porque "avergonzó a España" en la toma de posesión del presidente de Colombia, Gustavo Petro, La dirigente morada se refiere a cuando el Rey no se levantó ante la espada de de Simón Bolívar en la toma de posesión. Algo que no hizo dado que la espada, aseguraron entonces, no es un símbolo del Estado y su exhibición no formaba parte del protocolo trasladado. "El Rey fue a cara de perro a Bolivia, intentó humillar al presidente de Colombia en su toma de posesión", criticó Belarra.

Para los morados, el Rey "avergonzó a España y ahora no le invitan a México". Belarra esgrimió que "el Rey es un problema en las relaciones internacionales basadas en el respeto y los Derechos Humanos y no en la corrupción", dijo a través de sus redes sociales. Más tarde, en declaraciones a los medios desde el Congreso de los Diputados, la líder de Podemos lamentó que "el Gobierno ate sus relaciones internacionales a las de la Monarquía". "No es el camino para un Gobierno que se dice progresista", censuró.