Un detenido por rendir homenaje al etarra «Thierry» diseñó la cadena humana

«El movimiento popular en favor del derecho de decisión se están organizando en torno a "Gure esku dago/Está de nuestra mano". Es el paraguas para todas las iniciativas que pueden trabajar en favor del derecho». Sortu, la formación de la izquierda abertzale, cada día más presente en la vida del País Vasco y de la Comunidad Foral Navarra, hasta el punto de que expertos antiterroristas consideran que está llamada a convertirse en el partido hegemónico del separatismo de carácter radical, está detrás de la organización de la cadena humana convocada para hoy por un colectivo denominado precisamente «Gure esku dago», según han informado a LA RAZÓN fuentes conocedoras del asunto.

Las pruebas que justifican esta vinculación fueron encontradas por la Guardia Civil en un «pendrive» que portaba uno de los responsables de Sortu en Vizcaya, Iker Rodrigo Basterrechea, cuando fue detenido en abril de 2013 (es decir hace más de un año), en relación con el homenaje organizado en el aeropuerto de Bilbao en honor del cabecilla etarra muerto en Francia por causas naturales, Francisco Javier López Peña, «Thierry».

«Activación social»

En el citado dispositivo de almacenamiento informático estaban detalladas las líneas maestras para montar la cadena humana que hoy pretende unir Pamplona con Durango, en Vizcaya, y que pasará por diversas localidades, entre ellas Irurtzun, Uharte-Arakil, Beasain, Urrechu, Arrasate o Elorrio, con una extensión de unos 150 kilómetros, frente a los 400 que tuvo la que atravesó Cataluña de norte a sur en la Diada.

En concreto, en el contenido del pendrive, que está judicializado, se señalaba, entre otras cosas, que «como consecuencia de los foros a favor de la necesidad de la solución, en los pueblos existe el deseo de organizar la herramienta para reunir y activar los compromisos de muchos puntos de vista». Todo ello debía realizarse bajo tres principios fundamentales: somos nación, tenemos derecho a decidir y el futuro está en manos de la sociedad».

Sortu llegaba a la conclusión hace un año de que en todos los pueblos existía el deseo de formar «Gure esku dago», dentro de un plan general para «la activación social en la solución del conflicto». Curiosamente, el citado movimiento era equiparado a Herrira, que debía ser el instrumento debía impulsar el «regreso a casa de los presos y huídos políticos vascos». Para ello, se consideraba necesario «activar la sociedad, unir las voluntades para conformar las mayorías política, sindical y social. Y todo ello desde la amplitud y la pluralidad».

Tres ideas básicas

Sortu, partido legalizado por el Tribunal Constitucional, en contra del criterio sostenido tanto por la Audiencia Nacional como por el Tribunal Supremo, no debería tener ningún problema para, como se dice habitualmente, ponerse al frente de la manifestación, pero prefiere que este tipo de iniciativas sean presentadas como ideas de movimientos sociales y personas particulares, con el fin de que asistan el mayor número de manifestantes. De hecho, en la presentación de «Gure esku dago» sus promotores señalaron que pretendían dar a conocer legitimidad del derecho a decidir «siendo la diversidad y la pluralidad los principios básicos», es decir al margen de cualquier partidismo.

Se basa, dijeron entonces, en tres ideas básicas: «Euskal Herria es una nación, tiene derecho a decidir libre y democráticamente su futuro y su futuro está exclusivamente en manos los ciudadanos vascos».

Un largo historial

En el cerebro político

Iker Rodrigo fue arrestado por orden del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, ya que se le imputaba haber sido uno de los organizadores del recibimiento del cadáver de «Thierry». Rodrigo, que inició su andadura dentro de la izquierda proetarra en 1996, al entrar, como tantos otros, en las juventudes de Jarrai, pertenece al consejo provincial de Sortu en Vizcaya. Los agentes de la Benemérita le identificaron como uno de los principales organizadores del recibimiento de «Thierry», en el que, entre otros gritos y consignas, se pudieron escuchar «vivas» a «ETA militar» y «la lucha es el único camino». Sortu no negó la vinculación de Rodrigo con el partido y emitió una nota en el que atacaba al Partido Popular que, decían, en «su rol de enemigo de la paz, pretende, mediante la represión policial y judicial, condicionar el proceso de soluciones, a la que vez que mediante la utilización de los aparatos de Estado oculta que sus posiciones son absolutamente minoritarias en Euskal Herria». Además de pertenecer a Jarrai, en 1999 fue candidato de Euskal Herritarrok en las elecciones municipales de Erandio, su localidad natal. En 2003, repitió candidatura, esta vez integrado en la lista de la agrupación de electores «Erandiotarrak», pero la misma fue anulada por la Sala del 61 del Tribunal Supremo. En 2005, fue apoderado del Partido Comunista de las Tierra Vascas (PCTV) en los comicios al Parlamento Vasco. En 2009, fue uno de los capturados en la operación con la que se pretendía evitar la refundación de Batasuna, aunque tres años más tarde fue absuelto por la Audiencia Nacional de los delitos que se le imputaban.