Elecciones municipales

Votar en Tabarca, una odisea para sus 59 electores

Imagen de la pequeña isla de Tabarca
Imagen de la pequeña isla de Tabarcalarazon

El sencillo gesto de depositar la papeleta volverá a suponer el próximo 24 de mayo todo un periplo para los 59 electores de la pequeña isla de Tabarca.

El sencillo gesto de depositar la papeleta volverá a suponer el próximo 24 de mayo todo un periplo para los 59 electores de la pequeña isla de Tabarca, un tranquilo rincón del Mediterráneo sin mítines ni urnas, y donde para ejercer el derecho al voto será preciso tomar un barco y luego carretera, informa Antonio Martín

Esta isla conocida por sus aguas cristalinas y enclavada en la primera reserva marina declarada en España (hace casi treinta años) se halla a poco más de 5 kilómetros del cabo de Santa Pola aunque administrativamente pertenece a la ciudad de Alicante.

Por ese motivo, los 31 hombres y 28 mujeres con derecho a voto tienen su colegio electoral en el centro comunitario situado en la partida alicantina de Urbanova, a donde necesariamente deben llegar tras embarcarse y recorrer más de una decena de kilómetros por carretera.

Salvo las primeras elecciones democráticas, cuando sí hubo mesas electorales en el antiguo colegio tabarquino (hoy cerrado por falta de niños), la jornada electoral del próximo domingo se desarrollará igual que siempre: sin urnas.

Esto es así, según han aclarado desde el ayuntamiento alicantino, porque la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) establece que no caben mesas para votar con menos de 200 electores.

Los habitantes de esta minúscula isla, cuyo número de vecinos llega a caer en invierno a una veintena, deberán elegir una vez más entre el siempre menos emocionante voto por correo (normalmente los mayores) o dedicar parte de la jornada electoral a embarcarse a la península, normalmente en los pequeños botes particulares y con escala en Santa Pola.

El alcalde pedáneo, Vicente García Ruso, ha relatado a Efe que no se recuerda en la isla mitin de partido político alguno, ni en este proceso electoral ni en ningún otro, y ha añadido que la ausencia del ambiente propio de unos comicios también se refleja en que no se ven carteles de los partidos.

"Hay poca gente: No vale la pena", ha confesado este pedáneo que lleva 20 años en el cargo, los mismos que gobierna el PP la capital alicantina antes de insistir en que Tabarca, la única isla habitada de la Comunitat Valenciana, "no vive ambiente de elecciones"como suele ocurrir en cualquier otro sitio.

García Ruso ha recordado que el censo electoral baja año tras año -hace cuatro años había 77 electores por 59 en 2015- y entre las causas influye que algún vecino se ha empadronado en la cercana Santa Pola por motivos prácticos, como la inscripción de hijos en colegios.

En alguna ocasión, hace años, se usaba un pequeño barco del Ayuntamiento para un traslado conjunto hasta Alicante el día de las votaciones, pero eso desapareció hace ya bastantes procesos electorales.

De esta manera, aquellos que quieran ejercer su derecho al sufragio y no lo hayan hecho anticipadamente deberán obligatoriamente abandonar, al menos por unas horas, este privilegiado enclave para los amantes del sol y el buceo en pleno Mediterráneo.