Obesidad infantil

Un estudio simplifica la forma de diagnóstico de obesidad en los niños españoles

El estudio ha sido elaborado por el Grupo de Investigación de Excelencia ‘Nutrición para la vida’ de la Facultad de Farmacia de la Universidad CEU San Pablo, gracias a un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Villanueva de la Cañada (Madrid).

Gregorio Varela Moreiras del Grupo de Investigación de Excelencia ‘Nutrición para la vida’
Gregorio Varela Moreiras del Grupo de Investigación de Excelencia ‘Nutrición para la vida’CEU

La revista Nutrición Hospitalaria ha publicado recientemente el estudio “Waist circumference as a prognostic index of childhood abdominal obesity: findings in the Spanish population” realizado por los profesores Ana M. Puga, Teresa Partearroyo y Gregorio Varela Moreiras del Grupo de Investigación de Excelencia ‘Nutrición para la vida’ y el profesor Santiago Angulo, de la Facultad de Farmacia, Universidad CEU San Pablo, la Dra. Elena Sanchez Campayo, actualmente en la Clínica de Navarra, y la Fundación Española de la Nutrición. Los investigadores han establecido por primera vez puntos de corte de cintura para diagnosticar la obesidad en niños españoles. Según explica Varela, “esta nueva forma de medición es una alternativa simple y válida como criterio de diagnóstico de la obesidad abdominal en niños”. El estudio ha sido realizado con mediciones a más de 8000 niños entre 3 y 12 años, y ha permitido establecer los puntos de corte de circunferencia de cintura para el diagnóstico de obesidad. En concreto, los investigadores detallan: “en niños, los puntos de corte establecidos oscilaron entre 54,5 y 88,0 centímetros cm en los distintos rangos de edad. Por el otro lado, en niñas, los puntos de corte para el diagnóstico de la obesidad oscilaron entre 55,2 y 82,5 cm para las distintas edades analizadas”. La obesidad en población infantil se ha convertido en un problema de salud pública a nivel mundial, entre otras cosas, debido a su relación con un mayor riesgo de muerte prematura y discapacidad. Como apunta el catedrático de Nutrición y Bromatología, “el problema de la obesidad en España afecta a todos los grupos de población. Aproximadamente, 2 de cada 3 españoles padecemos exceso de peso”. En este sentido, Varela señala que los últimos datos, en cuanto a población infantil, nos indican aproximadamente que hay un 40% con exceso de peso. “Hemos triplicado las cifras comparativamente con lo que ocurría hace una generación; concretamente a nivel europeo, España es el segundo país, después de Grecia, en cuanto a la prevalencia del sobrepeso/obesidad entre los niños de primaria”. Además, apunta el experto en Nutrición, “tenemos un nuevo problema, al que denominamos nueva transición nutricional, que puede darse como consecuencia de cambios en los hábitos alimentarios y de actividad física relacionados con la pandemia COVID-19”. En consecuencia, destaca Varela, “hablamos de una creciente inseguridad alimentaria que puede llevar hacia una dieta menos saludable y sostenible y, por tanto, con peores consecuencias para la salud”.

Distintas formas de medir la obesidad

Desde el siglo XIX, la obesidad ha sido establecida a través del Índice de Masa Corporal (IMC), gracias a su excelente correlación con el porcentaje de grasa corporal. Sin embargo, en la población pediátrica se utilizan los percentiles. Los investigadores subrayan que esta no es la mejor forma: “es importante destacar que el IMC no es capaz de proporcionar información sobre la distribución de la grasa corporal, que se considera el factor de riesgo más importante para la enfermedad cardiovascular y la diabetes mellitus tipo 2, entre otras patologías”. Por ello, se han creado algunos índices alternativos que reflejan la adiposidad abdominal y que son muy fáciles de realizar, como la circunferencia de la cintura en la población adulta, entre otros. Sin embargo, hasta la fecha no se habían establecido dichos puntos de corte en la población pediátrica española, que es la novedad que introduce esta publicación. Con respecto a la metodología, Varela explica: “el estudio se llevó a cabo en 8.241 niños con edades comprendidas entre los 3 y 12 años. Se determinaron el peso, la talla y el perímetro de cintura, además del IMC. Para el diagnóstico de sobrepeso y obesidad de se utilizaron los criterios nacionales de la Fundación Faustino Orbegozo, y los internacionales de la Organización Mundial de la Salud y de la International Obesity Task Force”. Los resultados obtenidos suponen una metodología simple y de potencial utilidad tanto a nivel comunitario como clínico para el diagnóstico de obesidad abdominal de niños en España, y así poder contribuir a reducir este problema de tan elevada prevalencia ya en España.