La Policía Nacional recibió el año pasado un total de 16 denuncias por agresiones a personal sanitario en Galicia, según recoge el balance presentado este jueves por la Dirección General.

En concreto, por provincias, ocho de estas agresiones se denunciaron en A Coruña, seis en Lugo, tres en Ourense y una en Pontevedra.

En el conjunto de España, las denuncias llegaron a las 315, un 30% más que en el 2022. El 46% de esos casos correspondieron a agresiones físicas, y el 56% a agresiones verbales, producidas tanto en centros sanitarios como en servicios de atención domiciliaria.

El perfil de las víctimas de las agresiones corresponde en un 60% a mujeres, con una franja de edad entre los 36 y los 55 años, representando los hombres el 40% restante de las víctimas.

El total de los detenidos durante 2023 por las distintas incidencias ocurridas en el sector sanitario asciende a 115 personas. El análisis del perfil de los agresores desprende que el 66 por ciento son varones con una edad comprendida entre los 36 y los 55 años, que muestran un perfil carente de patologías y que uno de cada cuatro son familiares o acompañantes de los pacientes.

Asimismo, los datos analizados por Policía Nacional han permitido corroborar que ha sido en marzo el mes en el que más incidencias se han producido y que los lunes y los miércoles han sido los días de la semana con mayor incidencia, concentrándose las agresiones en la franja horaria comprendida entre las 11 y las 13 horas.

Las provincias con más denuncias el año pasado por agresiones a sanitarios fueron Málaga con 34, Alicante con 33 y Madrid con 24.

Por comunidades, el listado lo encabeza Andalucía con 102 incidentes, seguida de la Comunidad Valenciana con 44 y las Islas Canarias con 38. En el extremo opuesto, La Rioja, donde no se recibió ninguna denuncia.