Marion y Tabitha, tan «fashion» como mamá

S ería imposible imaginar a unas hijas más idílicas para quien fue la mítica Carrie Bradshaw de «Sexo en Nueva York»: aún no habían pronunciado su primera palabra y Tabitha y Marion ya hacían las delicias de los «paparazzi» de la Gran Manzana con su impecable estilo «''baby'' fashion victim». Si Sarah Jessica Parker se encumbró a través de la exitosa serie de HBO como una ineludible referencia «fashionista», a sus cuatro años, sus hijas gemelas ya se han consolidado como auténticos iconos de la moda. Estas «it girls» en miniatura han hecho de las calles de Nueva York su mejor pasarela y, aunque sus milimetrados «looks» podrían parecer obra exclusiva de su madre, lo cierto es que las pequeñas han demostrado ser dignas herederas de Parker y a su temprana edad han conseguido labrarse un estilo propio. De hecho, y según su famosa progenitora, son las pequeñas las que eligen su ropa, así que no es de extrañar que las pequeñas revelen tanta personalidad con sus dispares estilismos.

Aunque hasta el momento las diferencias entre ambas niñas era menos notorias (las dos solían ir ligeramente combinadas: ambas con una pieza del mismo corte –pantalones pitillo o vestidos casual– pero con distinto estampado), cada vez exhiben con mayor frecuencia sus diferentes –y puede que irreconciliables– gustos a la hora de vestir. Así, mientras que Tabitha ha demostrado su querencia por conjuntos clásicos como vestido y americana, a los que añade un toque transgresor en el color, siempre alegre y llamativo, su hermana Marion prefiere un estilo más «hippie» y relajado, con chaquetas de punto y vestidos étnicos. En lo que las retoñas de Parker suelen coincidir es a la hora de elegir un calzado cómodo: deportivas, manoletinas o sandalias «fashion» son sus zapatos de cabecera, nada que ver con los tacones de Suri Cruise, que escandalizaron a más de un pediatra. Y es que, si en algún aspecto estas pequeñas «fashionistas» se permiten el lujo de ser algo extravagantes es a la hora de elegir complementos: sus llamativas diademas o sus divertidos bolsos suelen llamar la atención de los transeúntes.

Nacidas por vientre de alquiler

Tabitha y Marion, que nacieron en junio de 2009 a través de un vientre de alquiler, revolucionaron la vida familiar de Sarah Jessica Parker. Aunque ya tenía un hijo, James Wilkie, junto a su marido Matthew Broderick, la pareja decidió ampliar la familia hace cuatro años y, desde entonces, la protagonista de «Sexo en Nueva York» se ha vuelto más selectiva en sus trabajos para no tener que alejarse mucho tiempo de los suyos. «Pienso en mi hijo despertándose el día de su cumpleaños sin mí estando a su lado y me podría morir», llegó a confesar en una entrevista la actriz, quien relató la emoción que sintió con el nacimiento de sus pequeñas, a las que acostumbra acompañar cada mañana al colegio. «Todo se paró. No puedo ni deciros qué otros sonidos había en el cuarto. Me enamoré de ellas desde el primer momento», recuerda. Parker, que se casó con Broderick en 1997, llegó incluso a afirmar que las gemelas le robaban mucho tiempo y su marido era la principal víctima de las demandas de las niñas. «Los matrimonios pueden sufrir cuando tienen hijos, ya que es muy difícil poder pasar tiempo juntos», aseguró la actriz antes de alabar las cualidades de su esposo. Y es que, a juzgar por su generoso fondo de armario y por su estilo, las pequeñas de la casa absorben todas las atenciones de su madre, que ha sabido revolucionar el concepto de «it girl» hasta convertir a sus hijas en las mejores «it babies».