Sólo faltan Obama y Shakira

Tendrá que ser Obama. Visto lo de ayer, tendrá que venir el presidente de Estados Unidos para realzar el día de inauguración real del AVE Madrid-Valencia. El Ministerio de Fomento tiró ayer la casa por la ventana en cuanto invitados centralistas se refiere, no así con los autonómicos como el secretario autonómico y el director general de Transportes, para un recorrido de pruebas, de cien kilómetros y sin superar los 200 kilómetros por hora.
Y eso que soy, como escribí hace unos días, de los que no quieren situarse entre los que se lamentan todavía de no haber gozado antes de este ferrocarril de alta velocidad, entre otras cosas porque significa un gran paso cualitativo y cuantitativo para la economía de la Comunitat y sus habitantes.
Da igual las cifras que se den. Todas están infladas. Lo sustancial es que el impulso del relaciones entre el centro de la península y nuestra Comunidad cambiarán sustancialmente al alza
A la vista de lo acontecido ayer, hasta Shakira podría ser contratada para amenizar el viaje y la llegada a la estación provisional -¿no será la definitiva?- de Valencia. Aún recuerdo la verbena que organizó el entonces gobierno socialista, en plena campaña electoral, por la supresión del tristemente semáforo de Europa cuando se abrió el by-pass. No les servió. Clementina Ródenas perdió las elecciones.
Así es la vida.