San José

El Barça se topa con un muro

El Barcelona es un alumno aplicado. Le gusta cumplir con sus tareas en el día a día y nunca acude a los exámenes de septiembre porque saca buenas notas. Pero el equipo de Guardiola se fue ayer de vacaciones y se dejó deberes pendientes para la víspera de Reyes. Fue incapaz de romper la defensa del Athletic y su presencia en los cuartos de la Copa se decidirá en San Mamés.

San José obstaculiza el avance de Messi hacia la portería de Iraizoz
San José obstaculiza el avance de Messi hacia la portería de Iraizozlarazon

Visto el resultado que le dio a su colega Pochettino plantear un partido de tú a tú al Barcelona y adelantar la defensa, Caparrós resolvió hacer todo lo contrario en su visita al Camp Nou. Situar a sus once jugadores por detrás de la pelota a la hora de defender y acumular hasta ocho efectivos en la frontal del área para reducir los espacios al máximo.Algo similar a lo que había hecho el Inter de Mourinho o, más recientemente, el Rubin Kazán.

Poco tardó el poco público que acudió a despedir el año futbolístico en el coliseo azulgrana de percatarse que la racha de «manitas» de su equipo tocaba a su fin. El frío y la lluvia no ayudaron a que el Barcelona pusiera la intensidad necesaria para resolver un partido como el que le planteó el Athletic. A la velocidad del balón le faltaba una marcha, indispensable para romper una defensa de ocho.

El Barça acumulaba minutos de posesión completamente infructuosos y tan sólo se asomaba a la portería de Gorka con disparos lejanos, como los de Bojan o Iniesta. Sólo Pedro parecía seguir tan enchufado como en Cornellà, donde completó un despliegue físico impresionante. Debe ser desquiciante el canario para sus rivales. Aparece por todos los lados y no para de correr. Todo lo contrario que Bojan, que ayer desperdició una nueva ocasión para reclamar más minutos de juego y se vio superado por el físico de sus defensores.

Guardiola había apostado por un once con bastantes componentes del que se ha convertido en su once de gala, pero reservó a Messi de inicio. Visto lo visto en el primer tiempo, la presencia del mejor jugador del mundo se hizo indispensable para intentar encarrilar la eliminatoria. La presencia del argentino en la banda en los primeros minutos de la segunda mitad despertó al respetable, que se excitó por completo cuando el técnico le dio entrada al campo.

La presencia de Messi animó un poco a sus compañeros, mientras los rojiblancos seguían agazapados en su área, renunciando por completo a ganar el encuentro. Debían haber apostado al empate a cero porque lo defendieron con uñas y dientes. El argentino intentó retrasar su posición para arrastra algún defensor, pero nadie caía en la trampa y el marcador quedaba a merced de alguna genialidad que nuncá llegó.

En un choque que ofreció poco a nivel futbolístico, justo es destacar la labor de Mateu Lahoz con el silbato. Dialogante y discreto, el valenciano completó una labor casi impecable, sólo se equivocó en la aplicación de una ley de la ventaja con Messi, y bien haría Sánchez Arminio en clonarle. Con arbitrajes como el de ayer se evitarían muchos circos.