Mercado inmobiliario

El incremento del IVA y el verano hunden la compraventa de viviendas

Esta vez sí: la compraventa de viviendas ha tocado fondo. Aunque la barrena en la que entró el sector a finales de 2007 hace casi imposible saber si este suelo es el definitivo o el desplome se seguirá agudizando en los próximos meses.

La compraventa de viviendas, en la cifra más baja de su historia
La compraventa de viviendas, en la cifra más baja de su historialarazon

De momento, lo cierto es que el INE contabilizó en octubre 27.198 transacciones, la cifra más baja de toda la serie histórica, y que supone un desplome del 17,7% con respecto al año anterior.

Los datos, no obstante, no corresponden a compraventas realizadas en el citado mes de octubre, sino a julio y agosto, pues para elaborar su estadística, el INE emplea los datos de los registradores de la propiedad, que inscriben las operaciones unos dos o tres meses después de realizarse. Se trataría, por tanto, de transacciones hechas en unos meses especialmente malos para el mercado inmobiliario como los de julio y agosto, en plenas vacaciones, circunstancia agravada este año con la subida del IVA del 6% al 8% que entró en vigor en julio. Ambos factores habrían contribuido a demoler un poco más un mercado ya de por sí al borde de la ruina.
Al mal dato del INE se sumó el proporcionado por Fomento, cuyas estadísticas hablan de que en el tercer trimestre de 2010 se vendieron 79.233 viviendas, un 26,3% menos que un año antes.

Desgravación

Pasado el efecto de la subida del IVA, que dinamizó las compraventas en los meses previos a julio, el sector confía ahora en la supresión de la desgravación fiscal. Desde el 1 de enero, los que perciban más de 24.107 euros brutos al año no podrán beneficiarse de esta deducción, lo que, según los expertos, animará a los que tengan tomada la decisión de comprar a hacerlo antes del 31 de diciembre. El alivio, aunque temporal, tendrá un efecto balsámico. Carlos Ferrer-Bonsoms, director de residencial de la consultora Jones Lang Lasalle, calcula que el repunte será «de dos dígitos».

Lo malo es que el «efecto desgravación» apenas durará hasta el 1 de enero. A partir de entonces, las ventas «volverán a ser muy malas», según advirtió a Efe el consultor inmobiliario José Luis Ruiz Bartolomé. A ello se suma que hay problemas como la incertidumbre o la falta de crédito que aún persisten, como apunta José Manuel Galindo, presidente de la patronal de los promotores.