Londres

La mayor «caza del hombre» en Inglaterra acaba con el suicidio del asesino

El asesino en búsqueda y captura que se había propuesto matar a todos los policías que se le pusieran a tiro se suicidó ayer de un disparo en la cabeza. Raoul Moat, un portero de discoteca de 37 años, tenía en vilo a la sociedad británica desde que salió de prisión el pasado viernes.

Un fugitivo británico muere en aparente suicidio tras ser cercado por la policía
Un fugitivo británico muere en aparente suicidio tras ser cercado por la policíalarazon

Nada más conseguir la libertad hirió a su ex pareja, mató al actual novio de ésta y quiso terminar con la vida de un agente de tráfico al que disparó de lleno en la cara. En una carta de 49 páginas en la que detallaba todas sus intenciones, el ex preso culpó a la Policía de todos sus problemas y aseguró que no pararía hasta acabar con todos los agentes posibles.Moat, padre de tres hijos, se disparó a sí mismo tras ser acorralado en un campo de Rothbury y murió poco después en un hospital de Newcastle. La Policía había estado negociando con él desde hacía unas seis horas. Según los testigos, antes de apretar el gatillo gritó que nunca había tenido un padre y que nadie jamás había cuidado de él.Su búsqueda había desencadenado una gran operación policial en la última semana, con decenas de agentes trasladados al norte de Inglaterra. Los vecinos habían sido obligados a permanecer en sus casas.La prisión de Durham, donde cumplió condena por agresión a un menor, había avisado de que tenía preparada una venganza para su ex pareja, que le había mentido diciendo que tenía un novio policía para que la dejara en paz. Durante su cautiverio, contó al resto de reclusos su dolor, pero al haber sido condenado a una pena menor, nadie en el departamento de Justicia avisó a la Policía ni vigiló sus pasos cuando se convirtió en un hombre libre.