Detenido en Lérida un mafioso que asesinó a un capo siciliano en 1998

Según ha informado hoy la Policía, Giusto, de 43 años y nacido en Alcamo, está acusado de asesinato, robo y tenencia ilícita de armas y ha sido ya trasladado a la Audiencia Nacional de Madrid, que deberá decidir si ordena su extradición a Italia.

En 1998, el arrestado, presuntamente miembro de la organización mafiosa siciliana "Mesina Denaro Mateo", asesinó a tiros a Giuseppe Magaddino, también perteneciente a una histórica familia vinculada con la mafia italiana, por lo que fue condenado a 28 años de prisión, según la policía.

El arrestado acabó con la vida de Magaddino con tres disparos en su residencia turística de "Baia Guidaloca", en la localidad italiana de Castellmare del Golfo, y le robó la cartera del bolsillo del pantalón.

Según la familia de la víctima, la cartera contenía documentos personales y un talonario con cinco cheques en blanco. Siete días después, el hijo de Magaddino alertaba a la policía de que uno de esos cheques, con firma falsa, había sido cobrado en una sucursal bancaria de Alcamo por valor de 3.821 euros.

Sin embargo, Giusto nunca llegó a cumplir la condena en Italia, ya que logró huir del país y establecerse en Venezuela, donde adoptó la falsa identidad de Roberto de Jesús T.R., supuestamente natural de Caracas.

Años después, Giusto consiguió entrar a España con pasaporte venezolano y se instaló en el municipio leridano de Alcarràs, donde también trabajaba.

De hecho, con la documentación venezolana pudo legalizar su situación en España como trabajador no comunitario y renovar sistemáticamente los permisos de residencia y trabajo.

En todo este tiempo, no obstante, los Carabinieri han intentado seguir su pista y últimamente habían centrado su búsqueda en España y, más concretamente, en Cataluña.

Tras más de trece años de búsqueda, la detención de Giusto se produjo a las 08.45 horas del pasado lunes en las inmediaciones de su domicilio, en la Avenida de Catalunya de Alcarràs.

Agentes de los Carabinieri y personal de la Oficina Nacional de Interpol-Roma se desplazaron a Lérida para coordinar e intercambiar información con los investigadores de la Policía Nacional que se hicieron cargo de su detención, que se produjo sin incidente alguno destacable.