La preocupación por el paro y los políticos en máximos históricos

La preocupación por el desempleo alcanzó un récord en marzo, cuando era la primera preocupación para el 83,9% de los españoles, algo menos del porcentaje registrado ahora, mientras que en febrero alcanzaba el 82,8% y en enero la proporción fue del 82,4%.

Estos elevados valores se registraron después de un trimestre de ligero descenso: en el barómetro de diciembre el paro era la mayor dificultad de España para el 78,6% de los encuestados, en noviembre también lo era para el 79,5% y en octubre, para el 81,1% de la población.

El segundo problema del país son las cuestiones de índole económica para el 46,6% de los españoles, con lo que se demuestra que la crisis sigue presente en los hogares. Muy por detrás aparecen los políticos como tercera adversidad (22,1%) y la inmigración en cuarto lugar (11,2%). Menor preocupación causan el terrorismo (9,1%), la inseguridad ciudadana (7,9%), la educación (5,6%), el Gobierno (5,4%), la corrupción (5%), la vivienda (4%), los problemas de índole social (3,7%) y las pensiones (2,7%).

Entre los problemas que más afectan peronalmente a los encuestados figuran el paro (45,5%), las cuestiones de índole económica (39,3%), la clase política y los partidos (6,7%), las pensiones (5,9%), la inseguridad ciudadana (5,2%), la sanidad (4,9%) y los problemas relacionados con la calidad del empleo (4,6%).

Situación económica
En cuanto a la situación económica actual, el 78,3% de los encuestados cree que se vive un momento "malo o muy malo"y sólo un 2,3% considera que es "bueno o muy bueno". No hay demasiado optimismo en que mejore, pues el 29,5% vaticina que dentro de un año será aún peor y sólo un 16,7% piensa que mejorará.

Tampoco es muy buena la valoración sobre la situación política que vive España en estos momentos. Para el 66,8%, la situación es "mala o muy mala", mientras que un 2,9% la juzga "buena", y sólo un 0,2% se atreve a calificarla de "muy buena".

Dentro de un año será todavía peor para el 20,8% de los ciudadanos, si bien un 12% augura que el clima político mejorará. El resto de los encuestados estima que seguirá "igual".

El CIS basa los resultados de esta encuesta en 2.482 entrevistas realizadas en 238 municipios de 49 provincias entre los días 3 y 11 de mayo de 2011, coincidiendo con el inicio de la campaña electoral de las municipales y autonómicas.
 

Más inseguridad

Una gran mayoría de españoles -más del 66 por ciento- considera que el mundo y la sociedad española en general son hoy más inseguros que hace cinco años y son también más los que creen que su barrio es hoy menos seguro que entonces -el 39,4 por ciento- que los que piensan que lo es más -un 16,3 por ciento-.

Así lo señala el barómetro de mayo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que revela que la sensación de inseguridad es menor en el entorno más cercano a los ciudadanos, ya que la suma de quienes perciben igual o más seguro que antes su barrio o pueblo -57 por ciento- es muy superior a quienes opinan lo mismo del mundo o de la sociedad española en general -30,4 por ciento-.

La encuesta hecha pública hoy, además, indica que los delitos de los que los españoles creen "muy"o "bastante"probable ser víctimas en su barrio son los menos graves -el 46,6 por ciento cita actos de vandalismo; el 44,5 la sustracción de algún objeto de su vehículo y el 39,8 el robo del bolso-, mientras una agresión sexual o personal sólo es vista como probable por el 7,3 y el 14,7, respectivamente.

En cuanto a las instituciones encargadas de garantizar la seguridad, un elevado porcentaje -superior al 71 por ciento- expresa "mucha"o "bastante"confianza en la Guardia Civil y la Policía, mientras que las Fuerzas Armadas (67,3), las Policías autonómicas catalana, vasca y navarra (62,3) y las Policías locales (60) también reciben buena nota.

La opinión sobre estas instituciones contrasta con la que los españoles tienen de los tribunales de Justicia, en los que el 61,9 por ciento tiene "poca"o "ninguna"confianza.

Por otra parte, el CIS revela que el 63,5 por ciento de los ciudadanos está dispuesto a "perder algo de libertad"a cambio de mayor seguridad, mientras que el 28,3 por ciento apuesta por "tener el máximo de libertad aunque eso pueda implicar algo de seguridad".

En este sentido, el 68,3 por ciento está a favor de la instalación de cámaras de videovigilancia en lugares públicos, sobre todo en bancos, guarderías y colegios, hospitales y comunidades de vecinos y urbanizaciones.