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«El Cuco» se muestra «impotente» en una carta «por no poder ayudar»

«El Cuco», el menor que está siendo juzgado por el asesinato y la violación de Marta del Castillo, reivindica su «inocencia» en una carta manuscrita remitida a Antena 3 Televisión hecha pública ayer. «No he estado ni estoy implicado, aunque todavía no se haya demostrado mi inocencia», asegura.

La madre de Marta, Eva Casanueva, en el juzgado.
La madre de Marta, Eva Casanueva, en el juzgado.larazon

Además, Javier G. M. solicita a la familia de la víctima que siga «dando ‘guerra' para que no archiven el caso y salga todo a la luz». El padre de Marta, Antonio del Castillo, lamentó «la hipocresía» mostrada por el presunto asesino de su hija y consideró que «siguen cachondeándose de todos y del Estado de Derecho».

«El Cuco» aconseja a los familiares de la desaparecida que «sigan aguantando» y que «no cambien nunca». «Aunque la gente diga lo que diga, tienen mi apoyo y yo haré todo lo que pueda para que el que hiciese o supiera algo lo pague o paguen», añade con «impotencia de no poder ayudar». Antonio del Castillo replicó que «El Cuco» «lo que tiene que hacer es decir muchas cosas que ha confesado y no ha dicho ante el juez» por «la influencia de su abogado». El padre de la víctima indicó que, durante estos días del juicio y desde hace dos años, «ni él ni nadie de su familia se han dirigido a nosotros».

Javier G. M. incide, con «rabia», en que «no quiero cumplir una condena» por algo que «no he hecho» y «por una ‘persona' que se suponía que era mi amigo y ahora me traiciona», en referencia al asesino confeso, Miguel Carcaño, a quien define como responsable del crimen. «El Cuco» mantiene que la noche del 24 de enero de 2009 estuvo «de botellón». «Me siento impotente por no poder haber demostrado todavía mi inocencia porque la verdad es que estuve de fiesta». El menor estima que «sería muy raro que tantas personas –los amigos que le ofrecen una coartada– digan lo mismo porque parecería que se lo han aprendido de memoria».

«La única implicación es que Miguel me acusaba de haberle ayudado con el coche de mi madre, cosa desmentida por la Policía; y luego haber violado y estrangulado a Marta, cosa que desmentí ante el juez en el careo», dijo. «El Cuco» reitera que se inculpó «porque era la primera vez que me detenían» y «la Policía me estuvo presionando con mentiras como que habían encontrado ADN en el coche». Según el menor, que tiene «miedo a que los del Grume cumplan su amenaza», un policía le dijo que le pegaría un puñetazo hasta escupir sangre y «amenazaron con detener a mi madre». La Policía, en el juicio, negó las acusaciones y aseguró que en un traslado el imputado confesó haber visto a Marta con mucha sangre. Su otro temor es que «me condenen por una cosa con la que no tengo nada que ver».

Javier pide que se «respete la presunción de inocencia». «Ojalá que el que haya tenido algo que ver viva 100 años para que hasta el día de su muerte recaiga en su conciencia lo que le hizo a una inocente», escribe. De Miguel, revela que «era como mi primo, pero me ha fallado y demostrado que no vale un duro como hombre y menos como persona».