Barcelona: un año de cambio por Xavier Trías

Hoy domingo 1 de julio hace un año de mi toma de posesión como alcalde de Barcelona. Una responsabilidad que asumía, conjuntamente con mi equipo de gobierno, consciente de que el trabajo y la situación económica que teníamos por delante no eran nada fáciles.

Un año después es el momento de hacer un primer balance de nuestra gestión. De cómo estamos configurando una Barcelona más competitiva económicamente, más justa y equitativa socialmente y que funcione mejor, con unos servicios públicos gestionados con criterios de excelencia. Una Barcelona, en definitiva, construida desde la voluntad de consenso con todas las fuerzas sociales, económicas, políticas y ciudadanas.

Es el momento de hablar de una ciudad que ha hecho los deberes económicos y financieros, que se ha ajustado el cinturón. Que ha conseguido ser una de las pocas ciudades cuyo Ayuntamiento salda todas sus facturas en tiempo y forma, paga a sus proveedores a 30 días y cerrará el presente ejercicio económico con déficit cero.

Una ciudad que, gracias a un esfuerzo de rigor y priorización, puede también invertir en las personas. Que ha incrementado los presupuestos en políticas sociales en un 8 por ciento, que ha aumentado los servicios de atención domiciliaria, que ha ofrecido 2.200 nuevas plazas de guardería pública, y que ha hecho posible que las becas-comedor en las escuelas lleguen a todo aquel que las solicita.

Nuestra ciudad, y el conjunto de su Área Metropolitana, cuentan con una economía diversificada y abierta al mundo. Con unos sectores económicos consolidados, un comercio de calidad, una industria de referencia en sectores como la automoción y la alimentación. Una ciudad con talento, carácter emprendedor y una marca de prestigio mundial. Somos la principal fuerza exportadora del Estado y el año pasado batimos todos los récords turísticos, tanto en número de visitantes como de pernoctaciones.

Barcelona necesita además potenciar su perfil como metrópoli global de futuro, con una apuesta por la cultura, el conocimiento, la creatividad, la innovación y el bienestar. Estamos trabajando para impulsar nuevos sectores productivos, como la economía verde, y para ser una ciudad líder en Europa en innovación urbana. Una apuesta de futuro por nuestro sector logístico, como puerta europea para las mercancías asiáticas. Impulsando a la vez las nuevas tecnologías, especialmente las móviles, aprovechando el potencial de ser la Capital Mundial de la Telefonía Móvil hasta el año 2018.

Unas apuestas que exigen rigor y coraje, visión de futuro, y no conformarse con las perspectivas económicas actuales. Tenemos el potencial y la energía necesaria para situarnos entre los mejores y esta es la ambición que nos hemos propuesto en Barcelona para los próximos años. Una ambición que, con la colaboración de todos, conseguiremos poner al servicio del bienestar y la calidad de vida, ofreciendo mejores servicios para las personas.

Xavier Trías
Alcalde de Barcelona