México

El vertido alcanza las marismas del Delta del Mississippi

Un mes después de la explosión, y posterior hundimiento, de la plataforma petrolífera «Deepwater Horizon», el vertido llegó ayer a las costas de Luisiana. Una peligrosa corriente podría llevar la mancha a Florida.

En el centro, el gobernador de Luisiana, Bobby Jindal, acudió el miércoles a las marismas para comprobar, en un viaje en barco, su estado tras la llegada de la marea negra
En el centro, el gobernador de Luisiana, Bobby Jindal, acudió el miércoles a las marismas para comprobar, en un viaje en barco, su estado tras la llegada de la marea negralarazon

Las frágiles marismas en torno al Delta del Mississippi ya han sido afectadas por la marea negra causada en el Golfo de México. «No son trozos de alquitrán, no es una capa aceitosa, esto es crudo pesado entrando en nuestros pantanos», dijo el gobernador del estado, Bobby Jindal, tras haber comprobado el miércoles, en helicóptero y en barco, la llegada del derrame a esa zona de la costa del sur de EE UU. La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA, por su sigla en inglés) ha advertido de que una pequeña parte del derrame ha entrado en una corriente, que circula en torno al Golfo, antes de trasladarse a las costas de Florida y subir hacia la costa del Atlántico, lo que podría desatar una catástrofe medioambiental aún más amplia y afectar a los cayos y playas turísticas de ese estado.Las autoridades de Florida apuntaron que esta pequeña cantidad de crudo absorbida por la corriente marina es poco probable que cause un sustancial daño, ya que además puede evaporarse en su camino hacia el estrecho de Florida y la costa sureste del estado. Los expertos de la NOAA indicaron que la mancha negra de petróleo, de llegar al litoral sur de Florida empujada por los vientos, lo haría en «lugares aislados» en forma de chapapote (fragmentos de alquitrán).Por otro lado, el secretario del Interior estadounidense, Ken Salazar, verificará de forma independiente el volumen de petróleo que ha vertido el pozo petrolífero submarino en el que operaba la compañía BP. El Gobierno ha recibido algunas críticas por la gestión que ha hecho de la catástrofe ecológica. El potencial impacto medioambiental que puede causar todo el petróleo vertido es incalculable. Las cifras de cuánto puede estar expulsando el pozo bailan casi todos los días. Ayer, la petrolera había informado de que estaba recogiendo 3.000 barriles al día, aunque se ha hablado de incluso 5.000 barriles diarios. Sin embargo, científicos y el Gobierno lo han cuestionado.