Castilla y León

Los inmigrantes siguen eligiendo a Castilla y León

Los inmigrantes siguen eligiendo a Castilla y León
Los inmigrantes siguen eligiendo a Castilla y Leónlarazon

Valladolid- Durante esta semana se ha sabido, gracias a un informe de la empresa temporal ‘Adecco', que más de 23.000 castellanos y leoneses se han tenido que marchar de su tierra a otras regiones españolas e incluso al extranjero para ganarse la vida y tener un futuro mejor. La mayoría de ellos, jóvenes de entre 25 y 35 años, afectados por la crisis económica y por la falta de oportunidades y expectativas.

Sin embargo, en lo que respecta a la población extranjera, la situación es distinta. En los cuatro años que España lleva de recesión económica reconocida, lo cierto es que el número de extranjeros que viven de forma legal en nuestra Comunidad no solo no ha menguado sino que ha ido creciendo poco a poco. Y aunque sí que es cierto que muchos de estos inmigrantes han regresado a sus países de origen hartos por no encontrar un trabajo estable con el que asentarse definitivamente, también lo es que son más los extranjeros que siguen viniendo a nuestra Comunidad que los que vuelven a su patria. Además, hay muchos con hijos jóvenes que han echado raíces en la Región y que ya no quieren regresar.

Así las cosas, actualmente están censados en Castilla y León 185.000 inmigrantes, lo que supone un crecimiento del 1,5 por ciento respecto al pasado año. Y se calcula que a lo largo de este año la cifra supere los 190.000 extranjeros legales. La mayor parte de ellos proceden de países de la Unión Europea (91.000), especialmente de Portugal, Rumanía y Bulgaria. También predominan los marroquíes, según el padrón municipal de 201, en el que llama la atención sobremanera el incremento de la población africana y asiática en Castilla y León.

En un año, se ha pasado de 23.000 africanos registrados a cerca de 27.000. Y de 4.700 asiáticos censados a más de 5.500. Y su principal problema, como el de los españoles, es el de encontrar trabajo.

 

«He pensado varias veces en irme, pero en Rumanía la situación es mucho peor»
LLegó hace tres años a Valladolid. Justo cuando se agudizaba la crisis en España. María Daniela Toader, «Dana» para los amigos, es una joven rumana de 23 años que lo dejó todo en su país, incluido un trabajo en una fábrica envasadora de embutidos, para venir a España a ganarse la vida y un futuro mejor. Nunca había salido fuera de su casa pero no se lo pensó dos veces cuando su hermana, que ya estaba en la ciudad y con la que vive, le pidió ayuda para cuidar de su hijo pequeño. Su vida en Valladolid no ha sido fácil. Sobre todo en lo laboral. En lo personal está contenta con el trato de la gente. Estuvo un año sin trabajar, y su primer empleo, en una casa y ayudando en la tienda de la misma familia, tuvo que dejarlo a los diez meses porque se sentía explotada y no podía más. Lo que le costó muchas lágrimas pero no frenó su sueño. Reconoce que en varias ocasiones ha pensado en volver a Rumanía, «pero allí la situación es mucho peor», dice. Habla bien el español y aunque lleva dos meses trabajando en el Bar La Venta del Fraile, estudia Gestión Administrativa. Su sueño: comprarse su propia casa aquí en España, y formar una familia.