Matanza de los leales de Asad en el funeral de un opositor kurdo

EL CAIRO- El cortejo fúnebre del líder kurdo asesinado el viernes, Meshal Timmu, en la ciudad siria de Qamishli se convirtió en pocas horas en una gran protesta contra el régimen. Las fuerzas leales a Bachar al Asad no tardaron en actuar y protagonizaron una matanza que, al cierre de esta edición y según la BBC, se había cobrado 14 vidas. Timmu fue tiroteado por hombres armados que irrumpieron en una casa donde el activista mantenía una reunión, según grupos pro derechos humanos. Timmu había jugado un importante papel en los últimos meses organizando las protestas en la región kurda de Siria, por lo que todo apunta a que detrás de su asesinato estaría el presidente Bachar al Asad. Los kurdos, que constituyen el grupo étnico más importante de Siria – el 15%–, no habían retirado del todo su apoyo a Asad en estos meses de revueltas, pero este incidente podría hacer que se unan definitivamente a la revolución. La ejecución de Timmu se suma a la de otras figuras opositoras destacadas, objetivo de ataques directos, así como sus familiares en los últimos días. El régimen ha endurecido su represión no sólo contra las manifestaciones, sino contra la red que se encuentra detrás, sobre todo tras la creación del Consejo Nacional Sirio, que pretende reunir a todas las fuerzas opositoras dentro y fuera del país y que ya ha pedido ser reconocido por la comunidad internacional.