Dispositivo policial disuasorio en Sevilla Este contra la prostitución

Sevilla- La Policía Local ha iniciado una labor de presencia disuasoria en la zona del Polígono Aeropuerto, entorno de expansión urbanística en Sevilla Este, después de hacerse públicas las advertencias de vecinos de este ámbito de influencia en lo tocante al aumento de la prostitución en las inmediaciones.

Fuentes municipales confirmaron a Europa Press que la Policía Local actuó en la noche del pasado miércoles en la zona y en la noche de ayer también estaba previsto desplegar un dispositivo, con la supervisión directa del concejal delegado del Distrito Este-Alcosa-Torreblanca, Ignacio Flores, con una reunión previa con los residentes afectados.

Sobre el particular, el alcalde, Juan Ignacio Zoido, declaró que sus colaboradores estuvieron con la Policía Local y que concretamente esa noche no había nadie ejerciendo la prostitución donde habitualmente se suele registrar esta actividad.

«Donde surjan, estaremos»
«No se puede erradicar de la noche a la mañana, pero el trabajo y el esfuerzo policial dan sus resultados, y así seguiremos», aseguró el primer edil de la capital, que recordó que en la zona de Nervión, otro de los puntos afectados, sí se ha conseguido paliar estos focos, «que tanto afectan a la dignidad de las mujeres». «Donde surjan, estaremos», añadió el regidor hispalense.

Zoido manifestó haberse quedado «tranquilo» por el hecho de que el pasado miércoles no hubiera nadie en las zonas denunciadas, apostillando que la Policía, en toda la ciudad, «trata de impedir ese ejercicio, porque considero que es una actividad muy vejatoria, y más en esas condiciones».

Respecto a los afectados, el presidente de la asociación de vecinos Polígono Aeropuerto, Carlos Valera, señaló a Europa Press que si en un principio este fenómeno se situaba principalmente en la rotonda situada al final de la avenida Emilio Lemos y en la avenida que acaba confluyendo con la calle Profesor Manuel Olivencia Ruiz, ahora «se lleva a cabo en la valla frente a la manzana habitada».

Según Carlos Valera, en este entorno se dan como consecuencia de ello casos de «exhibicionismo, reyertas, gritos y ruidos», razón por la que, además de al Ayuntamiento, los residentes del lugar han recurrido a la Policía Nacional, que les instó a presentar una reclamación formal en la que estuviera representada la colectividad de afectados.