Los obispos vascos reconocen que han tardado en «reaccionar» con las víctimas

Madrid- El obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, adelantó ayer que los tres prelados de la comunidad autónoma elaborarán «una carta pastoral» referente a la paz. Sin embargo, apuntó que antes «va a haber unos gestos inmediatos como es un encuentro por la paz y reconciliación en el inicio de Cuaresma y algunos otros gestos». Munilla se refirió al final de la violencia de ETA en una entrevista en Radio Euskadi y tras resaltar que la Iglesia propicia el diálogo y la reconciliación, mantuvo que debe hacerse «sin orillar» a las víctimas del terrorismo. «Hemos tardado mucho en reaccionar socialmente hacia las víctimas y tenemos una deuda muy grande con ellas», dijo. También opinó que hay que «tener cuidado» para «no difuminar» el concepto de víctimas porque, según ha afirmado, supondría una «ofensa» si se intentara convocarlas a encuentros «en los que se mezclan situaciones muy dramáticas, pero diferentes».

«Abordar el fin de ETA marginando a las víctimas, sería tanto como afrontar la violencia doméstica sin escuchar el grito de las mujeres maltratadas», añadió. Por ello, dijo que, desde ese punto de vista, «es normal que la Iglesia llame al diálogo, llame a la reconciliación, pero diciendo: "No cometamos más injusticias con las víctimas del terrorismo"».

Los tres obispos vascos, Mario Iceta (Bilbao), Miguel Asurmendi (Vitoria) y el citado Munilla, mantendrán una reunión antes del 25 de febrero, fecha de la celebración de un encuentro interdiocesano sobre pacificación. Este tema ha sido el elegido para abordar en 2012 por los integrantes de los Consejos de la Iglesia vasca, que reunirá también el 25 de febrero a sus Consejos Pastorales Diocesanos, según informaron a Ep fuentes del obispado de la capital vizcaína. Previsiblemente, los tres prelados consensuarán un texto que pueda servir de «contenido conjunto» para los encuentros oracionales por la paz que se celebrarán en las tres capitales vascas durante la tarde del 25 de febrero.

Las perlas de Uriarte
Una de las últimas declaraciones del obispo emérito de San Sebastián, Juan María Uriarte, encendió a las víctimas de ETA. El pasado enero afirmó que su dolor es «muy respetable y todo lo que se haga por repararlo será poco», pero consideró que este colectivo no debe «marcar la dirección política del Gobierno». En ocasiones anteriores señaló que «no habrá reconciliación ni paz duradera si hay vencedores y vencidos», y reclamó al Gobierno una política penitenciaria «más justa y humana».