Cataluña

Los finalistas de Cataluña y La Mancha no dan por perdido el almacén nuclear

La carrera por el ATC afronta su recta final sumida en la incertidumbre generada por el rifirrafe político del viernes, cuando el Ministerio de Industria anunciaba que Zarra había sido la candidata «elegida» para poco después ser desmentido por la vicepresidenta De la Vega ante el desconcierto y la indignación de la Generalitat Valenciana.

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Con los ánimos más calmados, ayer fue el turno de réplica de los otros favoritos designados por el informe técnico de la Comisión Interministerial, encargada de asesorar al Gobierno. Desde Ascó, segundo en la lista, aún no descartan ser elegidos, a pesar de que sectores de la Generalitat catalana –opuesta a la construcción del depósito en su Comunidad– cantasen victoria inmediatamente después del fallido anuncio.

Fuentes cercanas al Gobierno municipal (CiU) señalaron que, de acuerdo con el citado informe, la candidatura de Ascó, que obtiene 304 puntos (sólo cuatro menos que Zarra), «es la que tiene más calificaciones de ‘‘muy bien'' (MB)». En concreto, la candidatura cuenta con 14 MB y seis «bienes» (B), mientras que el aspirante «favorito» cuenta con 11 calificaciones MB y nueve «bienes».

Las citadas fuentes precisaron que la diferencia en la puntuación se debe a que hay «distintas valoraciones para cada aspecto», y lamentaron que no hayan tenido más peso factores como que Ascó es «el único candidato con estación de tren» o que los terrenos propuestos «son colindantes con la central de doble reactor» que existe en la localidad tarraconense. También destacaron que en las «piscinas» (depósitos refrigerados con agua) de la planta se almacena ya un millar de toneladas de combustible nuclear usado.

En cuanto a la posibilidad de que el «ganador» sea finalmente decidido en el Consejo de Ministros –que espera un segundo informe jurídico sobre las competencias autonómicas en el proceso– del viernes próximo, las fuentes dudan de que así sea. «De la Vega dijo que la semana que viene ‘‘seguirían estudiando'' el informe, no que vayan a decidir», aseguran.

La selección acumula ya un retraso de dos meses, y a partir de enero, Areva –empresa estatal francesa que almacena residuos nucleares españoles– empezará a cobrar 60.000 euros diarios hasta que éstos puedan trasladarse al ATC, que de todas formas no estará operativo antes de 2015.

Desde Yebra, tercero en la clasificación del informe técnico, su alcalde, Juan Pedro Sánchez (PP), alberga la esperanza de llevarse el gato al agua. «Ni mucho menos está todo perdido», dice. Sánchez, que recordó que, entre las cuatro localidades finalistas, sólo la suya y Ascó están avaladas por la Asociación de Municipios en Áreas Nucleares, estudiará el informe «en detalle, a ver si la valoración se ha hecho de acuerdo a los criterios establecidos». «Lo único que está claro de momento es que hay cuatro municipios que reúnen las condiciones para acoger el almacén», concluye.

En el informe, Yebra cuenta un «aceptable» (A) en calificación urbanística de los terrenos propuestos, uno de los cinco valores considerados relevantes (calificación, actividades nucleares, instalaciones de riesgo, zonas de interés estratégico y áreas protegidas cercanas). El informe valora mucho ese aspecto, que es precisamente el que le ha dado la victoria a Zarra. Por su parte, Ascó pierde puntos por la existencia en Flix, a 5 kilómetros, de la planta química de Ercros, considerada de riesgo.


Dos años de papeleo
No obstante, y a pesar de su buena calificación, Zarra es el único aspirante que no recibe MB en sismología, donde obtiene un «bien», al tiempo que el informe destaca que el 64 por ciento de la superficie del municipio está protegida. Sin embargo, el informe valora la inmediata disponibilidad de los terrenos ofrecidos por el Ayuntamiento, lo que podría ahorrar dos años de «papeleo» antes de iniciar la construcción.

El informe también tiene en cuenta que Zarra cuente con estudios de impacto ambiental y la «poca oposición» autonómica a su candidatura. A la Comisión sólo «le consta» un informe de alegaciones, pero ninguna resolución parlamentaria en contra, lo que sí sucede en los casos castellanomanchegos y catalán.



ANÁLISIS
Un caramelo para el alcalde elegido
- ¿Qué compensaciones recibirá el municipio donde se instale el ATC?

–El almacén nuclear llevará consigo unos seis millones de euros al año en compensaciones directas para la localidad que lo albergue y su área de influencia hasta 2075. Además, se crearán entre 300 y 500 empleos durante su construcción, que se prolongará hasta 2025, y otros 100 indefinidos.


- ¿A qué candidatos beneficiaría más la elección en términos económicos?
–A Zarra (Valencia) y a Villar de Cañas (Cuenca), pues en la actualidad no reciben ninguna compensación, algo que sí ocurre en Ascó y Yebra, por ser municipios en zonas de influencia de centrales nucleares. Se da la circunstancia de que Zarra es uno de los pocos municipios situado en estas áreas (la central de Cofrentes está a escasos kilómetros) que no recibe ni un euro.