Padres y espectadores contra los anuncios de contactos

La asociación nacional de padres de alumnos Concapa y la asociación de telespectadores Plaza del Castillo han exigido al Gobierno que ponga en marcha una ley que prohíba expresamente los anuncios de «contactos» en los periódicos de tirada nacional.

Las dos asociaciones han asegurado que «no podemos permanecer impasibles ante el lamentable espectáculo que ofrece gran parte de la prensa publicitando y, en consecuencia, apoyando y difundiendo la prostitución a través de las denominadas páginas de contactos, que están al alcance de cualquier lector, incluso menores de edad».

Ambas consideran que «hay que terminar con ese doble juego de la prensa que, por un lado, condena en columnas de opinión y artículos la explotación sexual, y por otro, trafica y se enriquece a costa de este negocio». A su juicio, este tipo de anuncios suponen un lucrativo negocio que pueden generar en un año hasta seis millones de euros. Es por esta razón por la que son pocos los diarios que los han eliminado o nunca los incluyeron. Entre ellos está LA RAZÓN, que ha determinado excluir este tipo de anuncios de sus páginas, además de 20 minutos o Público.Las asociaciones denunciantes creen que la publicidad de contactos supone, en muchos casos, «la difusión de conductas que rozan lo delictivo, como es la explotación sexual de menores».La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, llegó a decir en el pleno del Congreso que estos anuncios «son una vergüenza». Sin embargo, todavía no se ha tomado ninguna decisión que cambie la situación. Concapa y la asociación de telespectadores Plaza del Castillo han hecho un llamamiento para que los grupos parlamentarios se impliquen e impulsen la ley que prohíba este tipo de publicidad.

También han animado a los movimientos ciudadanos a que se unan a esta labor «para defender la dignidad de la mujer y acabar con la lacra de la explotación sexual». Las dos asociaciones han lamentado que se realice con mujeres y niñas de todas las edades y nacionalidades. «Parece que no queremos ser conscientes de que miles de niñas y jóvenes viven en manos de las mafias en situaciones similares a la esclavitud».