Fútbol sin límites

BARCELONA- Faltaba una hora para el inicio del clásico y en los pasillos del Camp Nou había más movimiento del habitual. El rumor de que Adriano iba a jugar de central por primera vez y ante el Madrid empezaba a coger forma. Cuando se hizo público el once del Barcelona comenzaron las especulaciones. Por nombres, el rumor se había confirmado, pero alguno se resistía a creerlo y especulaba con una posible defensa de tres para cuadrar la alineación. Pero en la primera jugada todo quedó claro. Adriano formaría pareja con Mascherano en el eje de la defensa. Tito le daba una vuelta de tuerca más a su equipo ante tanta baja y sorprendía con una decisión de laboratorio.

Todo lo imprevisible de la alineación azulgrana fue previsible en la de su rival. Mourinho no hizo ningún invento y formó con los once previstos. Los últimos resultados ante el Barça tampoco invitaban a variar el planteamiento. Adriano acabó siendo una buena opción. Ante la trascendencia del choque y la novedad del puesto, su rendimiento generaba muchísimas dudas, pero respondió muy bien. Sólo falló en la jugada del segundo gol blanco, en la que rompió el fuera de juego de Cristiano. Una acción que, seguramente, también hubiera sucedido jugando en el lateral y que no puede empañar su actuación.

Pero si Adriano fue el gran protagonista durante los instantes previos, los de siempre acapararon la atención durante y después. Porque cuando se habla de Cristiano y Messi resulta imposible no utilizar adjetivos elogiosos. Han hecho historia, la siguen haciendo y nada hace presagiar que no continúen igual. Hubo cuatro goles, dos por equipo. Los cuatro llevaron su sello.

Messi sigue escalando hacia la leyenda a pasos agigantados. Con sus dos dianas ya suma 17 en los clásicos. Sólo un mito como Di Stéfano le supera, con un tanto más. No le va a la zaga su máximo oponente en todo tipo de premios y galardones. Cristiano Ronaldo volvió a marcar ante el Barça y ya van seis clásicos consecutivos en que lo consigue. No hace tanto, algún iluminado había dudado del portugués en los partidos grandes. «Se esconde», aseguraban. Todo un atrevimiento que Cristiano no ha tardado en desmentir. El Real Madrid vive de sus goles, de su pegada, y él responde casi siempre.

Vilanova también apostó por juntar a cuatro centrocampistas por primera vez esta temporada. Sacrificó a Alexis Sánchez para poder dar entrada a Cesc e Iniesta en el once al mismo tiempo. Quería maximizar la posesión del balón, defender con la pelota para evitar las peligrosas contras del Madrid, pero durante muchos tramos del choque un mal posicionamiento de sus hombres permitió a los blancos tener el partido controlado.

Cristiano y Alves acaban lesionados
No está teniendo suerte el Barcelona con las lesiones en este inicio de temporada. La línea defensiva está siendo la más castigada. Ayer le tocó el turno a Dani Alves, que notó un pinchazo en la pierna izquierda mediada la primera parte y tuvo que se sustituido por Montoya, que rindió a muy buen nivel. El brasileño tiene lastimado el dichoso bíceps femoral y estará tres semanas de baja, por lo que no acudirá a los compromisos con Brasil. Tampoco salió indemne del clásico el Real Madrid. Cristiano Ronaldo acabó con problemas en el hombro izquierdo después de caer mal al intentar hacer una chilena en balde. El luso tiene un esguince en el ligamento del hombro y hoy será sometido a las pruebas pertinentes.