Del Bosque: «Una gilipollez un problema»

Potchefstroom- Ángel María Villar, presidente de la Comisión Técnica de Árbitros de la FIFA, defiende a los colegiados como si fueran sus hijos. Todo lo hacen bien, «están perfectos»; pero no es así porque lo que no puede ser no puede ser y además es imposible. Se tienen que equivocar, a la fuerza, son humanos, ¿no?; mas hay fallos excusables, asumibles, acciones que ni siquiera aclaran mil repeticiones en televisión, y otros, flagrantes, elementales, obvios, que los condenan, por inexperiencia, por ineptitud o por falta de criterio. En una competición como ésta se recurre a colegiados de los cinco continentes, y el fútbol no es igual en todos ellos; tampoco los trencillas son en Europa como en Asia. Ahí está el ejemplo del japonés Nishimura; no se enteró del España-Honduras. Según la prensa hondureña, «ignoró tres penaltis» en su área; nosotros constatamos dos. Tampoco vio el codazo de William Palacios a Busquets, más barriobajero que el que costó la expulsión a Gourcuff, ayer contra Suráfrica, o el del suizo Behrami ante Chile. Sobre éste dijo Del Bosque: «Si eso es expulsión, ¡joder!». Pues eso.Nishimura tampoco se enteró, y sus ayudantes menos aún, es que no vieron una, cuando en el saque de un córner Izaguirre trató de incordiar a Villa y le pisó cuando todavía Xavi no había sacado. No se percató de eso ni del cachete que el ariete español le propinó después mientras le recriminaba la acción anterior. «Yo creo que no fue ni un cachete –reflexiona Del Bosque–, un cachete fue lo de Ruiz Mateos, y puñetazos, los de Urtain».Dicho esto, no disculpó a su jugador, al contrario: «Estamos todos advertidos, lo hemos hablado con los jugadores, que saben que una gilipollez se puede convertir en problema. De todas formas, no le daría más importancia a este asunto».Pues parece que la FIFA sí se la está concediendo. Hay que esperar, no obstante, que como no tuvo trascendencia tampoco deje huella. Villa es pieza fundamental en el encuentro del viernes contra Chile. Es el único que ha conseguido marcar goles en Suráfrica. Y España tiene que ganar para asegurarse el pase a octavos.