Debate Estado Nación

Certero Aznar

La Razón
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Senadores españoles con una lengua común utilizando la traducción simultánea para entenderse. La imagen captura toda la dimensión del problema: «Nuestro Estado, tal como está configurado, es un Estado políticamente no viable y financieramente absolutamente inviable. Y alguien le tiene que poner el cascabel al gato». Valiente y certero, Aznar ha abierto en canal un debate inaplazable: cómo recuperar la fuerza de la nación española sin menoscabo de su pluralidad constitutiva. A salvo del interés electoral cortoplacista, el ex presidente plantea sin paños calientes el reto que nos aguarda en una situación límite. No basta con cambiar el Gobierno. Hay que cambiar las cosas. Y para ello se necesita una mayoría electoral, pero también política y social. Los padres de la Constitución del 78 diseñaron el estado autonómico para resolver la necesidad de reconocimiento a la diversidad de algunas regiones. Y confiaron en la lealtad del nacionalismo. No ha sido así. Su voracidad reivindicativa no tiene límite y se crece ante la debilidad de los gobiernos centrales. Así quiebra la solidaridad nacional, el control del Estado sobre los asuntos comunes se esfuma y los españoles dejan de ser iguales. La crisis ha terminado por demostrar que el bolsillo del contribuyente ya no da para mantener tantas administraciones haciendo lo mismo, pero cada uno a su manera y con su propia tropa.Aznar plantea un desafío de alcance constitucional. ¿Se atreverá con él un PP en el Gobierno? ¿Podrá contar con un PSOE recuperado de la irresponsable doctrina de la nación como concepto discutido y discutible? ¿O se conformarán ambos con seguir alternándose en la herencia de esta ruina?