Bruselas

El triángulo amoroso entre paracaidistas que acabó en tragedia

La justicia belga ha declarado culpable de asesinato a la maestra flamenca Els Clottemans, una mujer de 26 años acusada de haber saboteado el paracaídas de su amiga y rival amorosa, Els Van Doren, de 38 años, que perdió la vida al estrellarse contra el suelo el 18 de noviembre de 2006. El jurado tendrá que pronunciarse todavía sobre la duración de la condena, pero Clottemans se enfrenta incluso a la cadena perpetua.

Bautizado por la prensa belga como 'el juicio del año', al tener el caso muchos ingredientes de intriga policial, los miembros del jurado han considerado que Clottemans actuó con premeditación y por lo tanto que la muerte no fue accidental.

En aquella fecha, doce paracaidistas suben a una avioneta Cessna 208 para hacer una figura en pleno cielo, entre ellos Els Clottemans y Els Van Doren, que, además de amigas, comparten amante: el también paracaidista Marcel Somers.

Cuando el aparato alcanza los 4.000 pies de altitud, Els Clottemans es la última en saltar del avión y mientras todos despliegan sus paracaídas el de Els Van Doren no se abre. Intenta entonces activar el de emergencia, pero tampoco funciona y Van Doren, esposa de un joyero de Amberes y madre de tres hijos, se mata en el acto al caer sobre un jardin.

La investigación reveló que el paracaídas de Els Van Doren había sido manipulado porque las correas estaban rotas y entre los principales sospechosos figuraban inicialmente el marido, Jan De Wilde, su amante, Marcel Somers, y la propia Els Clottemans.

El cerco policial comenzó a estrecharse sobre Clottemans al descubrirse que una semana antes del salto que costó la vida a su amiga, estuvo en casa de Sommers, en Países Bajos, justo la noche en la que su rival se presentó de improviso obligándola a dormir en el sofá, donde Van Doren había dejado su paracaídas. Otro dato que levantó sospechas fue que un mes después de la muerte de la paracaidista, Marcel Somers dejó a Els Cottlemans.