Cataluña

Montilla desautoriza a Ausàs tras dar apoyo a las consultas independentistas

El tramo final de una Legislatura es muy propicio para marcar perfil propio. Tanto es así que ayer el conseller de Gobernación, Jordi Ausàs (ERC), decidió obrar por su cuenta y riesgo y comprometió el apoyo de la Generalitat para contribuir en todo lo posible para la organización de la consulta sobre la independencia de Cataluña que la plataforma Barcelona Decide piensa celebrar el próximo 10 de abril de 2011 en la capital catalana

Ausàs, tras la reunión de ayer con los representantes de la plataforma Barcelona Decide
Ausàs, tras la reunión de ayer con los representantes de la plataforma Barcelona Decidelarazon

Atónito ante el compromiso adquirido por Ausàs, el presidente de la Generalitat, José Montilla, decidió llamar al orden a su conseller. A continuación, el departamento de Presidencia emitió un comunicado desautorizando a Ausàs.

«El presidente de la Generalitat ha dado instrucciones esta tarde (por la de ayer) al conseller de Gobernación y Administraciones Públicas de no colaborar con la organización de la consulta organizada por la plataforma Barcelona Decide. Contrariamente a lo que había anunciado esta tarde la conselleria, el Govern no dará apoyo a esta consulta, que el president respeta como iniciativa cívica, pero que, según el ordenamiento jurídico, no puede tener el apoyo institucional de la Generalitat», afirmó Presidencia en un comunicado emitido pasadas las 21.00 horas.

En realidad, la polémica entre los socios del tripartito se fue incubando durante toda la jornada. Por la mañana, ya se sabía que Ausàs planeaba reunirse por la tarde con la plataforma Barcelona Decide con el objetivo de estudiar «mecanismos de colaboración». La consellera de Justicia, Montserrat Tura, negó a mediodía que el Govern fuera a dar apoyo institucional a la consulta y recordó que ya se celebraron referendos en Cataluña sin el respaldo de la administración «y no será diferente en Barcelona». Y así será tras la intervención final de Montilla.

Las consultas soberanistas han sido objeto de controversia entre los socios del tripartito durante todo el mandato. Hasta ayer, los consellers habían esquivado el debate en público con la excusa de que eran iniciativas que partían de la sociedad civil. Sin embargo, los dirigentes de ERC nunca han ocultado sus simpatías con estas consultas. (Ausàs, por ejemplo, votó en el referéndum del pasado 13 de diciembre en La Seu d‘Urgell).

Ayer, el conseller de Gobernación y Administraciones Públicas prometió urnas para la consulta y asesores para el proceso. Todo para «un ensayo general de referéndum». Pero, al final, Montilla le obligó a rectificar.


Culminar la oleada
- Las consultas sobre la independencia de Cataluña han seguido un guión parecido. Participación baja y victoria aplastante del «sí» a la independencia. Es decir, una iniciativa organizada por independentistas para independentistas.
- La consulta de Barcelona del 10 de abril de 2011, que los organizadores han visto en todo momento como la culminación del proceso, pone fin a este plan sin validez jurídica . Sin embargo, la organización de una consulta en Barcelona requiere un importante dispositivo. Según la plataforma Barcelona Decide, son necesarios 10.000 voluntarios para llevar a cabo un referéndum en la capital catalana.