Extremadura

OPINIÓN: En rigor déficit

La Razón
La RazónLa Razón

¿Qué ocurre cuando una familia recurre a un préstamo por haber gastado más de lo que ha ingresado ? ¿Y qué pasaría si esa situación se fuera encadenando y multiplicando año tras año? Esa familia está condenada al desastre.

Es difícil explicarles a todos los ciudadanos de una comunidad autónoma que las cuentas de su Gobierno están peor de lo que se esperaba, y es aún más difícil decirles las consecuencias que una situación así puede tener en todas y cada una de esas personas de no parar la peligrosa dinámica.

Por eso, cuando hace una semana presenté ante los extremeños la situación real de las cuentas de Extremadura, recurrí al símil que les decía al principio: el de una familia que gasta más de lo que ingresa y tiene que endeudarse continuamente para sobrevivir, sin ver que lo que les espera es una deuda que puede comprometer su futuro próximo. Esto es lo que ocurre en Extremadura: una peligrosa situación heredada del anterior Gobierno socialista que compromete el futuro de todos los extremeños.

Esta situación tiene cifras: un déficit sobre el 6,8% del PIB al término del año. La realidad es que el anterior Ejecutivo socialista había reconocido un 2,78% del PIB de déficit (superior a lo que ayer decía la ministra Salgado, debido al norma SEC de la UE), pero no contó con un 2,02% de ingresos ficticios (por deuda histórica, Fondo de Cooperación y venta de viviendas), que se sabía que no iban a llegar; y un 2,09% de gastos de 2010 que pasaron a 2011. Señora Salgado, lamentablemente ésa es la cifra que el Gobierno del señor Monago prevé a fin de año. Un problema tan grave se debe afrontar desde el primer momento con medidas de austeridad.