Marruecos
El PSOE condena por primera vez la violencia y censura en Marruecos
Los grupos parlamentarios del PP y el PSOE en el Senado alcanzaron ayer un acuerdo para condenar la violencia de principios de mes en el Sáhara Occidental, sin citar expresamente a ninguna parte, y censurar el «control informativo» que ejercieron las autoridades de Rabat al limitar el acceso de la prensa
Los senadores del PP, Antonio Muñoz Alonso, y del PSOE, José Carracao, pactaron el texto de una moción presentada originalmente por el PP que se disponen a distribuir al resto de grupos con el objetivo de que sea asumida por todos y se vote por unanimidad. El texto pactado incorpora el primer párrafo de la resolución que aprobó recientemente el Parlamento Europeo sobre los incidentes que arrancaron el pasado día 7 con el desmantelamiento por parte de Rabat del campamento de protesta saharaui situado a unos 15 kilómetros de El Aaiún. Así, insta al Gobierno español a «manifestar su más profunda preocupación por el notable deterioro de la situación en el Sáhara Occidental y condenar con firmeza los violentos incidentes que se produjeron en el campamento de Agdaym Izik cuando estaba siendo desmantelado y en la ciudad de El Aaiún». Pero además, incluye parte de la redacción propuesta por el PP al afirmar que estos incidentes violentos son «evidentes pese al control informativo que ha impedido el libre ejercicio de sus actividades a los profesionales de la información». La moción reclama también al Ejecutivo que asuma «un papel activo» en el proceso de descolonización del Sáhara y promueva la «modificación» del mandato de la misión de la ONU en el territorio, Minurso, para que tenga competencias en la vigilancia de los derechos humanos. Defiende que Minurso pueda investigar la muerte del saharaui con nacionalidad española Baby Handay Buyema, pide al Gobierno que promueva desde la ONU las gestiones necesarias para que el pueblo saharaui pueda ejercer el derecho de autodeterminación y que garantice la «libre circulación de los representantes de los medios de comunicación».
Por otra parte, la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, se comprometió ayer en la Cámara Alta a condenar los supuestos «malos tratos» recibidos por el ciudadano saharaui Ahmed Gachbar Baillal en una comisaría de El Aaiún tras el desmantelamiento del campamento de protesta saharaui si se confirman los hechos.
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