Alicia Sánchez-Camacho: «Queremos ser la segunda fuerza en Cataluña»

 – Desde que asumió las riendas del PP catalán, además de dar estabilidad al partido, ha roto casi todos los techos electorales. Este historial le asegura la reelección en el XII Congreso que el partido celebra este fin de semana en Barcelona. ¿Qué retos se ha marcado en esta nueva etapa?
–Puede haber un antes y un después para el PP catalán tras este congreso al que llegamos tras demostrar que podemos ser un partido de gobierno, porque facilitamos la gobernabilidad de Cataluña desde la oposición y ejercemos de interlocutor con Madrid. Ahora toca consolidarnos como un partido con personalidad propia, moderado y única alternativa al centro derecha catalán, que ha apostado por una deriva radical. Queremos ser la segunda fuerza en Cataluña, de centro derecha moderada, responsable y con «seny».

–¿Cómo se propone crecer?
–Desde el punto de vista estratégico tenemos dos objetivos: conseguir más presencia en el territorio y en la vida social catalana. Durante los primeros cuatro años de presidencia me he volcado en dar estabilidad al partido, ahora vamos a dedicarnos a conquistar a los votantes desencantados con el PSC, que en estos momentos no tiene ni estrategia ni liderazgo, y a los votantes de CiU que no quieren una ruptura con España.

– ¿Han conseguido atraer a gente joven?
–El votante del PP era mayor, pero en las últimas elecciones nos han apoyado jóvenes críticos con el «establishment», capaces de ver un PP más allá de los estigmas con los que nos describen.

– Quizá tenga que ver el giro catalanista que ha dado el PP, como demuestra la incorporación de la «senyera» en el nuevo logo o la defensa de un modelo de financiación «singular» para Cataluña.
– En la ponencia política presentamos un proyecto integrador pero con voz propia. Creemos en Cataluña como una autonomía histórica con personalidad propia. Defendemos un autonomismo diferencial, con su autogobierno y sus competencias, y un modelo de financiación singular para Cataluña más equilibrado entre lo que pagamos y recibimos, pero que también contemple una solidaridad finalista.

–¿Los resultados de su modelo de financiación son similares al pacto fiscal que propone CiU?
–El nuevo modelo de financiación ha de salir de un consenso entre los dos gobiernos. Cataluña tiene un déficit fiscal muy elevado, pero también es cierto que ha habido un gobierno que no ha gestionado bien los recursos y con el cual hemos de ser muy críticos. El objetivo es tener un mejor modelo de financiación que reduzca el déficit fiscal, pero también que se sepa gestionar bien.

–Pero, según su propuesta, ¿a quién le tocaría recaudar y gestionar el dinero de los ciudadanos catalanes?
–No estamos centrados, como CiU, en quién tiene la llave de la caja. Para nosotros es tan importante el fondo como la forma. Creemos que no toca plantear este debate en plena crisis, más cuando es el Gobierno quien mantiene la liquidez de Cataluña. Es un error por parte de CiU plantear la negociación del pacto fiscal como un debate de confrontación.

–Aunque ahora no toque, ¿Mariano Rajoy tiene la voluntad de escuchar la propuesta de Artur Mas?
–Pese a los momentos gravísimos de crisis que atraviesa el país, el PP catalán ha trasladado al Gobierno la importancia que tiene para Cataluña debatir un nuevo modelo de financiación. Y Rajoy y Montoro han entendido el mensaje. Es muy importante y necesaria una reunión entre Mas y Rajoy, son dos políticos con capacidad de entendimiento. Aunque su prioridad es salir de la crisis, el debate fiscal cabe en este diálogo. Mas debe ayudar a Rajoy a salir de la crisis y viceversa.

–Si Artur Mas convoca una consulta sobre pacto fiscal, ¿romperán con el Govern?
–Una consulta llevaría a una confrontación con España. Mas debe priorizar la transición hacia la salida de la crisis. No es momento de estrategias corporativas, es momento de políticas para salir de la crisis. Lamento ver a Mas más preocupado por el pacto fiscal que por salir de la crisis.

–¿Se imagina un escenario con una Cataluña intervenida?
–Cataluña no será intervenida. El Gobierno ha prestado especial atención a su situación financiera, a través de las líneas ICO garantizará la estabilidad económica de Cataluña. El Gobierno está apoyando a Cataluña en todo momento, a diferencia de lo que hizo Zapatero, que ni pagó sus deudas ni dio dinero para los proveedores y las pequeñas empresas.

– ¿Es difícil ejercer de mediadora, porque por ejemplo no ha logrado que los 211 millones de euros que el Estado adeuda a Cataluña?
–No están incluidos porque no había dinero y este año no se ha incluido la disposición de ningún otro Estatuto en los presupuestos. Los que ejercen el victimismo, la confrontación entre Cataluña y España, buscan la primera oportunidad que tienen, y una es esta. Cataluña es la Comunidad Autónoma con mayor fondo de suficiencia global, 2.500 millones para inyectar liquidez en las empresas, tenemos unos fondos ICO para tener gasto corriente. Todo esto la gente que se queja no lo dice, buscan la primera oportunidad para exprimir el discurso de que España maltrata a Cataluña.