Miguel Falcón Castro agricultor: «Hay que atraer a los jóvenes al campo»

«Desde que nací he estado vinculado al mundo de la agricultura. Soy, de hecho, hijo de agricultor. Mi empresa, Agroquivir, es una cooperativa de segundo grado que está compuesta de otras cuatro, todas ellas dedicadas al forraje para el ganado. Estamos centrados en Andalucía, pero también trabajamos en Canarias y Emiratos Árabes, donde hemos exportado unas 12.000 toneladas de alfalfa durante este año. Se trata de un mercado muy exigente, pues reclaman un producto de alta calidad para alimentar a camellos y vacas. En este sentido, los procesos de innovación que hemos impulsado han sido clave, como la inversión en deshidratadoras.

El problema principal de la agricultura española es que ha estado abandonada por la Unión Europea. No le han dado el valor que se merece. Los políticos no se dan cuenta de que es el sustento de la humanidad. Valga sólo un ejemplo: durante estos años, salvo el presente, hemos tenido pocas armas para el combatir el problema fitosanitario.

La propuesta que se me ocurre para mejorar la situación, y que en mi opinión es imprescindible, sería conseguir la unidad de las cooperativas.

Además, otro de los retos a los que nos enfrentamos es determinar la solución al problema de la intermediación, de los precios. Es fundamental la mejora de las redes de comercialización para nuestro futuro.

Y respecto a qué espero de Europa, creo que la negociación en Bruselas es un tema bastante oscuro. Considero que la reforma de la PAC es difícil, pero no imposible. En cualquier caso, será una tarea que tendrá que asumir el próximo Gobierno.

Pero no quiero terminar sin hacer constar algo primordial: debemos hacer atractivo para que la gente joven regrese a la industria agroalimentaria, mucha juventud se volcó en el sector de la construcción y el campo se resintió por ello».