Alemania autoriza a la ultraderecha a exponer caricaturas contra el islam

Un portavoz policial señaló hoy que los jueces desestimaron por segunda vez una petición oficial del ministerio de Interior de dicho estado para la prohibición de la muestra de las polémicas caricaturas por su carácter ofensivo y provocador.

El partido, con representación en algunos ayuntamientos locales, tiene intención de exponer cerca de las mezquitas de las localidades de Remscheid, Solingen y Bergisch Gladbach caricaturas antiislámicas, entre ellas las del dibujante danés Kurt Westergaard, cuya publicación a mediados de la pasada década provocó fuertes protestas en el mundo musulmán.

Además, Pro-NRW quiere exponer las caricaturas ganadoras de un concurso convocado por la propia formación de ultraderecha, que dio lugar a una polémica en Alemania por su carácter provocador y la posibilidad de que elementos radicales musulmanes tomen represalias por esa iniciativa.

El titular alemán de Interior, Hans-Peter Friedrich, calificó de irresponsable el concurso convocado por el partido de ultraderecha en unas declaraciones publicadas por el semanario Der Spiegel y advirtió de una posible ola de violencia como consecuencia de la polémica iniciativa.

También Ralf Jäger, ministro de Interior de Renania del Norte-Westfalia, criticó la "provocación"de la minúscula formación que calificó de "piromanía ideológica". "No quieren más que provocar y crear inseguridad a los musulmanes. Con la agitación islamofóbica no hacen sino fomentar los prejuicios y la intolerancia con el fin de captar votos", dijo Jäger este fin de semana.

Pro-NRW es un pequeño partido de ultraderecha con representación en algunos ayuntamientos del estado de Renania del Norte-Westfalia como Colonia sumamente crítico con el islam y los inmigrantes procedentes de países con esa religión, que lucha además contra la construcción de mezquitas en este país.

Pro-NRW es objeto de observación permanente por los órganos de defensa de la Constitución alemana, que consideran a esta pequeña formación un partido radical de extrema derecha.
Las autoridades alemanas temen que provocaciones como las de Pro-NRW conduzcan al descrédito de este país en el mundo musulmán y a una crisis como la que sufrió Dinamarca en 2006 por la publicación de las caricaturas de Westergaard.