América

Toledo

Mamá quiero ser crupier

Juan Esteban Espinosa es el primer español que estudia Gestión y Dirección de casinos en la Universidad de Nevada

Fulltiltpoker
Fulltiltpokerlarazon

Todo el mundo aficionándose con la familia a las cartas. Horas y horas que hacían perfección y conocimiento de los entresijos del mundo de los naipes. Juan Esteban Espinosa tiene 26 años y empezó a los 4 jugando al tute con su abuela y sus primos todos los domingos. Religiosamente. Estando en su Toledo natal en la piscina de la urbanización se dedicó diariamente al mus. Se fue a Madrid a estudiar ingeniería técnica en informática de gestión y en el Colegio mayor donde estuvo durante 4 años cultivó el gusto por la «pocha» y poco a poco se aficionó al póker. Hasta aquí todo normal. Pero en el momento en el que tus familiares y amigos ya no quieren jugar más contigo, la cosa se pone seria. «Primero empecé a meterme en el mundo del póker por internet y enterarme de sitios donde se juega. Aprendí mucho sobre la organización de torneos y partidas de "cash"». Directamente se lanzó a conocer profesionales del juego fuera de España y se decidió por ir nada más y nada menos que a la capital del juego en EE UU: Las Vegas. «Desde aquí es más fácil estar enterado de todas las novedades en el mundo del juego. Así que me decidí a estudiar un curso de dos años en Dirección y Gerencia de casinos». Para empezar tuvo la suerte de conocer por internet al director del curso, David Hernández. A partir de ahí sólo tuvo que apostarlo todo al viaje. Como quien dice, cogió los bártulos y se convirtió así en el primer español en estudiar en Nevada. Puede decir que siempre contó con el apoyo de sus familiares y amigos más allá del asombro. «La verdad es que todo el mundo se lo tomó bien. Mis amigos y compañeros de trabajo me animaron desde el primer momento y quieren que aprenda lo máximo para mejorar el juego en España». Su apoyo más importante es su hermano Manuel que es el que más confía en él y en su futuro. Por supuesto «a mis padres les da pena que me aleje, pero saben que es lo que me gusta y están contentísimos de que tenga la valentía de tratar de aprender lo máximo».

Para mantener el tren de vida en Las Vegas Juan trabaja ocasionalmente. «Con el curso tengo bastantes horas ocupadas, de 10 de la mañana a 9 de la noche. Pero cuando puedo, trabajo de crupier de póker en el "Caesars Palace"». La selección para el trabajo es más que curiosa: «Te tienen que dar el ok a tu curriculum online para después pasar una primera entrevista con recursos humanos. Luego viene pasar una prueba de juegos, es decir, hacer una demosración de que sabes ser crupier y qué juegos sabes. Para finalizar te hacen una entrevista en grupo ya que todas están pensadas para seleccionar a gente simpática que tenga buen trato con el cliente». «Es obligatorio sonreír», aclara Juan. Por otro lado están los beneficios ya que «el sueldo es mucho más alto que en España y además la vida en la ciudad es mucho más barata que Madrid».

Cuando se le pregunta por las situaciones difíciles que puede encontrarse rodeado de gente ansiosa por jugar y por ganarse el dinero explica que «trabajando en Madrid sí que ha habido situaciones jodidas, hasta el punto que algunos clientes te insultan e incluso llegan a amenazarte ya que les das "malas"cartas o cosas similares». En EE UU esa situación «afortunadamente» es muy rara. «En América son mucho mas duros y ante el mínimo mal comportamiento de un cliente se le expulsa inmediatamente». Todos pensamos en borrachos o gente que le sobra el dinero y monta el espectáculo, pero Juan nos saca del error: «Nunca he visto situaciones complicadas, salvo que, como en cualquier otro sitio, se vuelven escandalosos o más habladores pero nunca he visto que se violenten por el alcohol, sino por perder mucho dinero».«En las puestas altas, no existe problema. Los apostadores altos o "high rollers"son los más tranquilos; simplemente juegan alto porque tienen mucho dinero detrás». Explica la oportunidad de aprender a tratar a la gente, aquellos a los que hay que pedir que abandonen la mesa. «Yo ahora tengo la oportunidad de estudiar sobre eso, es parte de la asignatura de psicología. Ves desde problemas de adicción hasta como pedir a la gente que abandone la mesa (si la situación es violenta se avisa inmediatamente a seguridad) o deje de jugar. En los años que llevo trabajando nunca he visto que a alguien se le pida que abandone la mesa. Se me olvidaba, claro que me he sentido mal cuando veo a la gente enferma que pierde mucho dinero».

Intentando meter el dinero en la llaga, a la pregunta de si le sienta mal dedicarse a algo que le saca el dinero a la gente y que hace que la gente se comporte de manera diferente, Juan se planta: «Yo no me dedico a eso. Lo comparo con quien trabaja en un bar y vende alcohol; el 99% de los clientes disfrutan de eso y un pequeño porcentaje tiene problemas. Yo tengo una visión del negocio del casino como un intercambio de dinero por entretenimiento. Esa mentalidad es la que quiero tratar de cambiar en España. La gente va al cine o a la bolera y paga dinero por entretenerse, yo quiero que en España la gente pueda ir al casino pague dinero y se entretenga más que en cualquier otro centro de ocio, y encima brindarle la oportunidad de que pueda ganar dinero». Juan lo tiene muy claro y apuesta por la diversificación del ocio. «Siempre he oído en todos los casinos españoles que no hay competencia y yo siempre les he llevado la contraria; tu competencia es todo dentro del ocio: teatros, cines, boleras, karts, bares. Lo que hay que hacer es que la gente en su día libre venga a tu casino aunque no juegue, porque tú le tienes que brindar mil formas alternativas de ocio».

Al preguntarle por la situación comparada de la estructura del mundo del juego con España lo tiene muy claro porque hay «millones de diferencias entre España y EE UU en cuanto al juego. No sólo que aquí hay muchos más tipos de juego, sino que en Las Vegas está todo estructurado por y para el cliente». En este sentido sí que se asemeja a la ficción de las películas o las series porque «cuando llega un cliente tu única misión es hacer que se lo pase mejor que en toda su vida y que se vaya deseando volver de nuevo». Y lo más importante es que «da igual que juegue 100 millones o 10 dolares». «Una parte importantede eso es escuchar al cliente. Es la única manera de mejorar lo que estás haciendo y conseguir ser el mejor». Para que nos hagamos una idea nos cuenta que «aquí tú entras en un casino y tienes restaurantes de lujo, de medio precio y "fast food". También cines, boleras, bares de todos los tipos, teatros, salas tipo Galileo Galilei o Clamores con shows baratos. Salas de apuestas gigantes donde ver fútbol o cualquier deporte en decenas de pantallas. También discotecas, sitios donde tomar una copa tranquilo, tiendas de ropa, joyerías, relojerías.... todo lo que te puedas imaginar para entretener». «En Las Vegas todo empleado de casino está obligado a sonreír en todo momento», lo que dice mucho.

Juan tiene su futuro bien orientado y muy claro, pero no pasa sólo por aprender y trabajar en Las Vegas sino que «de momento seguir aprendiendo ya que tengo una oportunidad única, y en el futuro tratar de que alguien me dé una oportunidad en España, ya que se pueden mejorar muchísimas cosas y hacer crecer la industria del juego haciendo que el casino no sea un lugar en el que solo se pueda jugar».«En América estoy genial, pero mi país es mi país. Mi sueño sería volver y tener la posibilidad de adaptar las cosas que se pueden de América ya que hacerlo con todo es imposible».

No ha dejado de practicar, aunque ahora mande en el juego. «La verdad es que sí que sigo jugando, aunque sólo al póker, ya que es lo que más me gusta, y por supuesto te dejan jugar en tu casino o en cualquier otro». «Cuando estaba en España jugaba mucho al póker online, pero desde que llegué aquí no he vuelto a jugar online ya que tengo mil posibilidades de jugar en los casinos, cosa que prefiero y es para mi infinitamente mejor, porque hablas con gente, te relacionas... Aunque lo más demandado son las máquinas de azar y para los asiáticos el bacarrá».

Y como todo español que se precie tiene su propia anécdota que cuenta emocionado: «Algo que casi me hace llorar y que siempre recordaré. El día que España ganó el mundial yo trabajaba a las pocas horas, y el director del torneo empezó por el altavoz a decir las normas del torneo y de repente dio la enhorabuena a todo "el país de España"y en especial al crupier de poker de esa nacionalidad, o sea yo, mientras me daba un abrazo y todos los clientes me felicitaron por ello. Ese detalle me llegó porque no lo esperaba y estando tan lejos de tu país se agradece». Hagan Juego.



Escuela de poker
El curso que recibe en el «College of Southern» en Nevada tiene una parte común con Dirección de Hoteles. Entre otras cosas te enseñan a manejar el trato con el cliente que «es fundamental». «Estudiando dirección de casinos sí soy el primer español, lo mismo es la primera vez que soy el primero en algo». En el proceso de selección para la universidad sólo necesitas la High School, «en mi caso selectividad y pasar el test de inglés de la universidad». Para ello asistió a cursos en Nevada que te preparan «yo tuve que estar cuatro meses aprendiendo sólo inglés, divertidísimo». También estudian Marketing para atraer y mantener a los clientes y todos y cada uno de los juegos del casino incluídas las máquinas de azar y las apuestas deportivas. «Para mí lo más aburrido es contabilidad y leyes. Me interesa el trato con los empleados o la resolución de conflictos». «El primer contraste es la cercania de los profesores con el alumno, supongo que será igual en toda América y además están los compañeros que te ayudan en todo lo que pueden».


El tirón del Poker Online
En los últimos años existe un crecimiento a gran escala del póker gracias a internet. Los propios gobiernos ven la posibilidad de quedarse con una parte del pastel que mueve cientos de millones al año. Mientras Suráfrica lo prohibió el pasado mes de agosto, Grecia anda detrás de una legislación que le permita beneficiarse del juego online y en el caso español, donde hay que tributar como ganancias patrimoniales no sujetas a retención, se está estudiando un modelo para regular el sector. LA RAZÓN habló con varios usuarios que juegan habitualmente a través de la red. Normalmente el primer contacto es a través de la propia navegación y por mediación de las páginas de juegos online; los amigos tambien son una baza. Las páginas más visitadas son Ladbrokes, Pokerstars, Fulltiltpoker, entre otras.
Entre los hábitos llegan las diferencias. Algunos usuarios juegan entre dos o tres veces por semana y los gastos no superan los 10 euros al mes. Los que llevan más tiempo juegan una media de 6 horas semanales, llevan jugando varios años y gastan bastante más. Las razones de jugar online vienen desde el entretenimiento: «No creo que me haga rico con esto, pero si suena la flauta y gano algo de pasta pues genial». El repunte del juego online de poker viene ayudado por las cadenas de televisión, que con la era digital, retransmiten partidas, celebradas en España y en el mundo. Cuando se les pregunta si tienen miedo de que se convierta en una patología, contestan con rotundidad que «no, lo tengo asumido, gracias a Dios que no tengo mucho y aún me controlo». Eso sí, nos dan un consejo: «No juegues más dinero del que te puedas permitir».