El respiro de los proveedores

Juan Carlos Aguilera - Director general de Ferring
«El cobro de las facturas puede alargarse hasta los 900 días»

Juan Carlos Aguilera es director general de la compañía farmacéutica Ferring, una multinacional que vende sus productos tanto a farmacias como a hospitales públicos, siendo estos últimos los que más de un quebradero de cabeza le están dando. Son las comunidades autónomas las que deberían pagar las facturas, pero cada vez se retrasan más y, actualmente, Aguilera reconoce que «nos deben cerca del 30 por ciento de la facturación». Unas facturas cuyo cobro puede variar «desde los 60 días hasta los 900», ante lo que Aguilera reconoce que «no hay color político a la hora de cobrar o no».
Sobre la medida anunciada por el Gobierno, si bien considera que «suena muy bien», muestra ciertas dudas sobre qué ocurrirá en el futuro cuando se acabe el dinero del crédito. De momento, «es importante, interesante y tenemos esperanza», comenta, pero se pregunta si los bancos van a conceder créditos a autonomías que están al borde de la ruina.

Luis Carnicero - Kiosquero jubilado
«Me deben 10.000 euros en periódicos desde 2001»
Desde su kiosco de prensa de la localidad madrileña de Parla, Luis servía periódicos al Ayuntamiento, al Hogar del Jubilado, a la Biblioteca municipal... Unos tres o cuatro juegos de cada cabecera al día. Quizás se trate un producto no demasiado caro, pero con el tiempo, sumando y sumando, la deuda del Consistorio fue acrecentándose.
«Me deben 10.000 euros desde 2001 y la deuda llegó a ser de 36.000», afirma Luis, que ahora está jubilado y ha cedido el negocio a su hija. «Antes yo podía asumirlo, pero mi hija ahora no puede», por lo que «desde hace más de tres años hemos dejado de servirles», comenta.
De momento, no se fía mucho de medidas como la del crédito a los ayuntamientos para pagar a proveedores: «Hace unos cinco años se dio un dinero para pagar a pequeños proveedores y yo no he visto una peseta», reconoce, aunque mantiene algo de esperanza de poder cobrar finalmente lo que se le debe. Una cantidad que puede resultar ínfima para una empresa mayor, pero que para alguien como Luis es todo un mundo.

Ana Sa - Directora de Espacio Exterior
«Siempre soy la última en cobrar»
La empresa que dirige Ana Sa se dedica a la publicidad y trabaja habitualmente con el Ayuntamiento de Zaragoza y el Gobierno de Aragón. Hacen desde las famosas campañas de postales gratuitas hasta otras más grandes, de impacto, como banderolas, o la gestión de soportes en lugares estratégicos de las ciudades. Pero tarda mucho en cobrar sus trabajos. «Me deben unos 60.000 euros y mi empresa es pequeñita», asegura Ana, quien también es presidenta de la Asociación de Medios y Agencias de Publicidad de Aragón. Las facturas pendientes van de los 123 hasta los 4.000 euros, ante lo que reconoce que se produce «un efecto dominó, demorando pagos a los empleados y, aunque afortunadamente voy pagando, siempre soy yo la última en cobrar». La inyección de fondos del Gobierno la ve como «la luz al final del túnel. Lo valoro positivamente porque del apoyo que dieron a los bancos a nosotros no nos salpicó nada». De momento, reconoce que sigue aceptando trabajos porque «no puedes decir que no, pero contratan mucho menos que antes».