La Junta «castiga» a Sevilla: aplaza los tranvías y el AVE al aeropuerto

SEVILLA- La crisis se está llevando por delante, al menos de momento, buena parte de las necesidades de obra pública de la provincia de Sevilla. A la apuesta «rácana» por una red de metro con muchos tramos en superficie y numerosas carencias y el «parón» de Fomento a la SE-40 –que retrasará entre uno y cuatro años el proyecto–, se suma ahora la reprogramación drástica emprendida por la Junta para obras de vital importancia para la movilidad en la capital y su entorno.

La bajada general del ritmo de ejecución de proyectos afectará, en primer lugar, a las conexiones tranviarias de varios municipios con la capital a través de la Línea 1 de metro. En concreto, se aplaza en seis meses el inicio de las obras de la segunda fase del tranvía de Dos Hermanas, el tramo final del de Alcalá de Guadaíra y los pasos inferiores de tráfico de la plataforma tranviaria del Aljarafe en Mairena. La inauguración de todos estos proyectos, largamente demandados por los ayuntamientos implicados, se verá inevitablemente retrasada. Por ejemplo, la culminación de dos tercios del tranvía de Alcalá estaba prevista para principios de 2011, pero, con la reprogramación anunciada ayer por consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, los trabajos no se retomarían hasta dicha fecha. Esta conexión cuenta con 12 kilómetros, desde la estación Pablo de Olavide del metropolitano hispalense hasta la parada de Montecarmelo, en Alcalá.

El tranvía de Dos Hermanas –con ocho kilómetros y diez paradas– y el del Aljarafe, de 28 kilómetros, tienen más peso que el anterior en cuanto a población afectada. El primero dará servicio a 100.000 habitantes; el segundo, a 174.000 vecinos.

La conexión de la estación de Santa Justa con el aeropuerto de San Pablo mediante la Alta Velocidad, proyecto que se engloba en el tramo Sevilla-Antequera, sufre también un duro revés con una demora de ocho meses en el inicio de los trabajos. El comienzo de dicha obra, que se acometerá bajo tierra y que comprende 10 kilómetros de longitud, estaba previsto inicialmente para el primer trimestre de este año. El resultado debía estar operativo en 38 meses. La reprogramación dinamita el calendario y, en septiembre, Obras Públicas y Fomento se reunirán para buscar una salida.

La consejera Rosa Aguilar justificó este «castigo» de la Administración autonómica a Sevilla en que «es la provincia en la que más se invierte». La Junta se felicita, además, de que esta reprogramación «no supone la rescisión de contratos ni la paralización de actuaciones», sino sólo modificaciones en los plazos y mantiene su «compromiso» con la obra pública en la provincia.