Cataluña

Los testigos aseguran que el autor de los cuatro crímenes de Olot actuó a sangre fría

Puig tenía dos cuentas bancarias en las que acumulaba 30.000 euros

La Razón
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BARCELONA- Con precisión, tranquilidad y a sangre fría. Así actuó Pere Puig, de 57 años, el pasado 15 de diciembre cuando mató a cuatro personas en Olot (Girona) con su escopeta, según las personas que presenciaron el brutal suceso. Una treintena de testigos comparecieron ayer ante el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Olot encargado de la investigación, para relatar el fatídico día en el que murieron a balazos el propietario de construcciones Tubert, su hijo y dos empleados de banco.
Puig actuó «con una precisión sorprendente y con mucha tranquilidad», explicó uno de los abogados de la acusación particular, Carles Monguilod, referente a lo que habían dicho los testigos. Muchos presentes coincidieron en que Puig dirigió los disparos a las personas a las que quería matar sin dudas ni contradicciones.
«Se veía una acción premeditada, a sangre fría, ya que apuntaba discriminando a quien quería disparar y a quien no», explicó Monguilod describiendo las declaraciones. Uno de ellos incluso explicó que era el hombre que estaba en medio del propietario de construcciones Tubert y su hijo en el bar «La Cuina de l'Anna». «Puig sabía a quién tenía que disparar», dijo éste.
Uno de los 30 testigos relató que intentó frenar al albañil cuando salía del bar donde cometió los dos primeros crímenes pero, después de que Puig le apuntara con la escopeta, él se echó a suelo ante la posibilidad de acabar muerto.
No estaba arruinado
A pesar que la defensa del acusado, la letrada Nuria Masó, mantiene que Puig pudo actuar por un móvil económico, según Monguilod, éste no estaba arruinado y tenía 30.000 euros en dos cuentas a plazo fijo junto a su padre.