Griñán gana «a pulso» una partida de dominó

Marbella- Los 15 días de petición de voto se van esfumando a golpe de rueda. El de ayer, en la caravana del PSOE estuvo marcado por las anécdotas. La primera parada: Marbella. El candidato, Pepe Griñán, visitó el barrio Divina Pastora donde volvió a ser fotografiado, besado, abrazado e incluso firmó un autógrafo «con afecto» a Juan Andrés. En el mercado, un espontáneo le desveló el secreto de por qué el PSOE «no mete goles» y ha perdido «millones de votos». La clave está en el pulpo. «Usted será muy bueno, pero sus asesores no», le estampó, muy enfadado porque la Junta ha impedido la pesca de cefalópodos con tablilla en la zona. Pasos después, en el bar, J. –José– Antonio, pidió un café y jugó al dominó con Ángel, Manuel, Juan y Manolo.

Ganó «a pulso», según Ángel, quien matizó: «Pero aquí no sirve. Donde hay que salir triunfador es en la Junta». Visitó también un centro de día para personas mayores en el que se repartió un «kit» del PSOE: propaganda, una piruleta, un llavero, una pulsera con la bandera de Andalucía y las siglas de la formación y, por supuesto, las papeletas de voto. Ya en uno de los mítines exprés del día, una mujer lo interrumpió al grito de «sinvergüenza». Los simpatizantes socialistas respondieron, pero Griñán los calmó con elegancia aseverando que insulta quien no tiene nada que decir.

En Arroyo de la Miel (Benalmádena), unos jóvenes le pidieron los 10 euros que solicitan a los empresarios para el Filmando Film Festival, un maratón de cortos. Su respuesta: «¿Yo soy una empresa?». Se pagaron. En el acto público en sí, recordó el 133 aniversario del nacimiento de Albert Einstein y abogó por una educación pública de calidad para que los niños andaluces puedan llegar a emularlo aunque sus familias no tengan medios. Esa apuesta por la educación y la sanidad pública, la «herencia de la gente del pueblo, su legado», fue una constante en las intervenciones de por la mañana. También las alusiones a Rajoy y la contraposición de los dos modelos que medirán fuerzas el 25: «La seguridad de lo hecho frente a la incertidumbre del cambio». Convirtió a los presentes en sus «agentes electorales». Les pidió su complicidad para llevar gente a las urnas. Por la tarde, en un acto sectorial de turismo, animó a «ganar la imagen» del destino «Andalucía Sostenible», que no es la tierra de «la subvención o las ayudas».