Marruecos acusa ahora a España de enfermar de cáncer a su población

El presidente del Partido Autenticidad y Modernidad (PAM), fundado hace dos años por Fuad Alí el Himma, amigo personal del rey Mohammed VI, ha solicitado una investigación internacional sobre los crímenes de lesa humanidad presuntamente perpetrados por España durante la guerra colonial contra el pueblo marroquí. Pero por si no fuera suficiente, Benchemmach afirmó que España cometió «crímenes atroces», empleó gases que mataron a «decenas de miles de civiles» y envenenaron al ganado y gran parte de las tierras cultivables y provocaron «un número significativo de enfermos de cáncer» y otras secuelas que «aún perduran en un importante sector de la población», aunque sin especificar en cual.

Lo hizo el sábado en la sesión de la Cámara de Consejeros dedicada a analizar la resolución del Congreso de los Diputados del pasado jueves, en la que también pidió al Gobierno alauí que suspenda todos los programas de cooperación con España en materia de inmigración ilegal, narcotráfico y terrorismo, así como plantear la cuestión de Ceuta y Melilla, ante el Cuarto Comité de la Asamblea General de la ONU.

Al respecto se pronunció ayer el presidente melillense Juan José Imbroda, que calificó de «disparate» que Marruecos vaya a recurrir a Naciones Unidas para reclamar la soberanía de Ceuta y Melilla y exigió al Gobierno español firmeza ante las continuas manifestaciones en este sentido.

Continuarán las protestas
Por otra parte, y tras el fracaso de la «Marcha Verde» del sábado, a la que apenas acudieron un centenar de jóvenes de diferentes asociaciones semidesconocidas, ayer se anunciaba una nueva concentración para el próximo sábado, esta vez en Melilla. En esta ocasión, lo harán bajo la consigna de que Marruecos deje de ser «el gendarme de Europa», y solicitarán que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados investigue las «condiciones inhumanas» en las que, según ellos, viven los subsaharianos en Melilla.