Griñán cede ante el Gobierno y ahora prefiere cargar al FLA los 600 millones

Sevilla- La Junta ha acabado dando un giro total en sus argumentos sobre los 600 millones que le ha inyectado el Gobierno para hacer frente al vencimiento de deuda que tiene pendiente. Desde un primer momento, el mensaje lanzado desde San Telmo ha sido que es preferible recibir este dinero –ya ingresó 400 millones el lunes– como adelanto de la Participación en los Ingresos del Estado (PIE). La Junta pidió el montante global de 1.000 millones hace un mes con cargo a las entregas por recaudación tributaria que les tiene que hacer el Ejecutivo central y ha tratado en todo momento de no mezclar esta reclamación con una eventual solicitud del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).

El motivo fundamental es que el dinero del anticipo no tiene recargo de interés. El que esté condicionado al FLA, sí. Ayer la última referencia del bono español a diez años marcaba un interés del 5,88 por ciento. El del FLA será menor, pero aún así se moverá en una horquilla entre el 3 y el 4 por ciento, similar al recargo exigido por Europa a España en los fondos para sanear la banca. En esta línea argumental se ha movido el presidente andaluz y también otros miembros de su Ejecutivo. Griñán ha recordado en más de una ocasión la doble vara de medir con Andalucía, que ha recibido –según sus cifras– sólo 211 millones de euros de adelanto y en el año 2010, mientras que Cataluña ha recibido 1.805, la Comunidad Valenciana 1.398 o Madrid 710. El Gobierno central negó a Andalucía un adelanto de 1.000 millones en julio.

En el último Pleno, la semana pasada, el parlamentario socialista José Caballos ilustraba claramente las reticencias de Andalucía a pedir dinero con cargo al FLA debido al recargo de interés. Está en el diario de sesiones: «Hemos pedido mil millones para poder pagar a los proveedores, a los ayuntamientos, a las empresas, que tanto les preocupa a los señores de la derecha que no se les paga, pero que no nos ayudan para que se nos dé el anticipo. Hemos pedido mil millones. Por tanto, al ser nuestro el dinero, al cero por ciento de interés, y se le ha negado a Andalucía».

Sorprendió Griñán ayer cuando aseguró que es «preferible» que los 600 millones sean parte del FLA si las condiciones del préstamo son «buenas», en línea con lo reclamado por el Gobierno central. «Con la capacidad de endeudamiento que tiene Andalucía, a partir del objetivo de déficit señalado y de las emisiones de deuda autorizadas, preferimos la vía de endeudar hasta el límite del déficit que no pedir el anticipo». Casi a la misma hora la consejera de Presidencia, Susana Díaz, no aclaraba cuál sería la vía de la petición (anticipo o FLA) y restaba importancia a este aspecto aludiendo a que podían «sumarse» las cantidades. El PP no dejó pasar la oportunidad para denunciar la falta de coordinación. «Griñán tiene que poner orden en su gobierno», señaló la vicesecretaria de Empleo Carolina España.

La Tesorería General de la Junta recibió ayer los 600 millones para frente al vencimiento de deuda de hoy de la misma cuantía. La clave, por otra parte, del viraje en el discurso por parte de la Junta. Todo apunta a que el Gobierno andaluz solicite formalmente el FLA –ha marcado un techo de 4.906 millones– tras el Consejo de Gobierno del próximo martes.