Castilla y León

Animan a los discapacitados a formarse para poder trabajar en la función pública

El Gobierno regional adaptará las convocatorias de oferta pública con el objetivo de que se cubra el diez por ciento que se reserva a estas personas

La Razón
La RazónLa Razón

Valladolid- Tan solo 240 personas con alguna discapacidad trabajan en estos momentos en la Administración pública. Lo que supone apenas un 0,2 por ciento de las alrededor de 150.000 personas que forman parte de este colectivo en Castilla y León. Un porcentaje ínfimo, pese a que nuestra Comunidad reserva un diez por ciento de las plazas en las convocatorias de empleo público a este colectivo.

Aunque, lo cierto, es que en cada prueba de acceso este diez por ciento nunca se cubre. «No hay demanda», reconocía ayer la propia consejera de Familia, Milagros Marcos. ¿Las causas? Varias. Pero, sobre todo, que las personas con alguna discapacidad carecen de material para poder prepararse en condiciones. Pero también, que las pruebas tampoco están adaptadas a cada discapacidad, por lo que la gran mayoría desiste en presentarse al no verse con posibilidades ni preparados para poder trabajar en la Administración. Por este motivo, la consejera avanzaba ayer que la Junta va a modificar el actual modelo de convocatoria de oferta pública para cubrir ese diez por ciento. A la vez que animaba a estas personas a que aprovechen este tiempo de crisis en el que se ha paralizado la oferta para formarse y prepararse lo que mejor que puedan para cuando se convoquen nuevas plazas. Medidas que se complementan con otras que ya ha puesto en marcha la Consejería esta legislatura para promover el empleo entre las personas con discapacidad. Algo esencial para este colectivo en su búsqueda por alcanzar la plena autonomía. Entre estas medidas, se incluyen también la apuesta de la Junta por la conversión de los centros ocupacionales en centros especiales de empleo o la renovación del acuerdo que ayer firmaban las consejeras de Familia y la de Hacienda, Pilar del Olmo, con el vicepresidente del Cermi, Francisco Sardón, para contratar a personas con discapacidad de forma temporal en la Administración pública. Un convenio que permitirá a tres personas con una discapacidad superior al 33 por ciento, elegidas por el Cermi, desempeñar un trabajo en la Junta durante seis meses con opción a otros seis, que les servirán como prácticas y para tomar contacto con la rutina laboral diaria. En abril terminó la primera fase de este programa experimental en el que seis discapacitados han trabajado en la Administración. «Son serios, útiles y muy eficientes. Y además, no se cansan nunca», destacaba de ellos Pilar del Olmo, tras dar fe de que el despacho de personal «está muy ordenado» gracias a su labor.

Con uñas y dientes
Por su parte, Sardón se mostraba satisfecho por el compromiso de la Junta con la discapacidad. Pero iba más allá al pedir a la empresa privada que contrate a estas personas «porque son iguales e incluso más eficaces que otros trabajadores, ya que saben lo que les cuesta llegar y defienden su trabajo con uñas y dientes». «Castilla y León -continuó- debe ser ejemplo también en la contratación de discapacitados».