Los feudos del PSOE se confabulan para castigar a los «más ricos»

Los barones socialistas temen que los recortes sociales aprobados por el Gobierno de Zapatero puedan pasarles factura de cara a las próximas elecciones autonómicas y no están dispuestos a perder su granero de votos. Su electorado está pidiendo gestos y, por ello, los feudos socialistas –aquellos que reciben mayores subsidios, como el PER–, se han lanzado a subir los impuestos a los «más ricos» tomando la delantera al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Y es que aunque el jefe del Ejecutivo ha «coqueteado» con el conocido como impuesto del millón de euros a las rentas más altas, en Moncloa aún no tienen nada claro. Lo único que ha anunciado el presidente es que quedarán excluidos de la nueva tasa el 99,99 por ciento de los españoles, es decir que sólo afectaría a 45.000 personas. En los feudos socialistas el número de afectados por la presión fiscal variará en función de lo que cada presidente autonómico considere «más ricos». Así, en Extremadura se ha establecido en 60.000 euros y en Cataluña en el doble. Una vez más, las diferencias territoriales se imponen:BALEARES En las Islas, el presidente del Gobierno balear, Francesc Antich, planteó una subida de un punto en el tramo autonómico del IRPF también para las rentas superiores a 100.000 euros. CATALUÑAPor su parte, el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla y el tripartito lo hicieron para los aún más ricos, elevando del 21,5 por ciento al 23,5 por ciento la parte autonómica del tributo para rentas superiores a 120.000 euros, y el gravamen ascenderá al 25,5 por ciento para bases liquidables a partir de 175.000 euros. ASTURIAS Asturias fue la tercera comunidad autónoma que decidió incrementar los impuestos a las rentas más altas tras anunciar que aplicaría una subida del tramo autonómico del IRPF para las rentas superiores a 100.000 euros. Para los sueldos que estén en la horquilla entre 100.000 y menos de 175.000 euros podrían tener una subida de dos puntos. A partir de los 175.000 euros al año sería de tres. Andalucía y Extremadura han sido las últimas en sumarse a esta subida impositiva contra los ricos.ANDALUCÍAEl presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, anunció en el Parlamento, durante el Debate sobre el Estado de la Comunidad, una nueva amalgama de subidas tributarias que afectarán a los que el PSOE denomina «ricos», pero también al conjunto de la ciudadanía. En concreto, Andalucía incrementará el tramo autonómico del IRPF para rentas superiores a 80.000 euros a partir de enero de 2011. La Junta aún no ha facilitado datos de sus previsiones de ingreso con esta medida, pero los últimos datos registrados en la Agencia Tributaria del año 2007 cifran en el 3,42 por ciento los contribuyentes que declararon ingresos por rendimientos del trabajo entre 60.000 y 150.000 euros. Griñán añadió a esta subida dos nuevas: un impuesto sobre los depósitos en las entidades de crédito en Andalucía –independientemente de donde tengan su sede fiscal– que ascenderá al 0,3 por ciento hasta los 150 millones de euros en depósitos, un 0,4 por ciento hasta 600 millones y un 0,5 por ciento para más de 600 millones. La segunda iniciativa es gravar con diez céntimos cada bolsa de plástico no reutilizable que facilitan los establecimientos comerciales. Serán estas empresas las que tengan que liquidarlo. Además, la Junta, también se sumará a otras CC AA e instaurará el polémico céntimo sanitario, puesto en duda por la Comisión Europea. EXTREMADURAPor su parte, el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, aplicará una subida del tipo marginal del IRPF en el tramo autonómico, para las rentas superiores a 60.000 euros, que será progresiva en función de la renta. Así, según la modificación el tramo autonómico del IRPF se incrementará en un 0,5 por ciento para rentas superiores a 60.000 euros; en un 1 por ciento para rentas de más de 80.000 euros; y en un 2 por ciento para las que superan los 100.000. Para rentas de más de 120.000 euros, aumentará un 3 por ciento. El extremeño también prevé un total de doce medidas fiscales entre las que figurará un incremento del 15 por ciento en el impuesto de los depósitos bancarios, informa Ep.