Bruselas

El Banco de España se alía con Merkel contra las subidas salariales

El regulador pide que se valore que el IPC ha repuntado de forma excepcional cuando se negocien los sueldos 

La Eurozona acepta el pacto por la competitividad impulsado por Merkel
La Eurozona acepta el pacto por la competitividad impulsado por Merkellarazon

Dijo Angela Merkel a renglón seguido de criticar la vinculación existente en España entre los salarios y la inflación que su intención no era inmiscuirse en la política salarial española. Con intención o sin ella, sus declaraciones, en las que aseguraba que los sueldos sólo pueden subir cuando hay beneficios, han generado un intenso debate en el que Gobierno y sindicatos se han erigido como los principales detractores de las tesis de la canciller alemana y los empresarios en sus más firmes aliados. Aunque puede que estos últimos no estén tan solos como pudieran pensar. Porque el Banco de España (BdE), en su Boletín de enero, aunque no aboga de forma tan taxativa como Merkel por desvincular el aumento de los sueldos del IPC, sí que deja entrever que sus preferencias en la materia están más cerca de Angela Merkel que de José Luis Rodríguez Zapatero.

Moderación salarial
Para la institución que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez, aunque los costes salariales continuaron su proceso de moderación durante 2010 –los salarios en la empresa privada subieron un 1,8%, frente al 3,7% que lo hicieron en 2009–, la moderación salarial debe prolongarse en los próximos trimestres.

Es aquí donde entra en juego la inflación. Para el BdE, la negociación salarial que ahora se inicia debe, en su opinión, tener muy en cuenta que el IPC ha subido de forma notable en los últimos meses por circunstancias excepcionales, que es algo que no se mantendrá en el tiempo y que, por tanto, no debería trasladarse en su totalidad a los sueldos. «El proceso de negociación colectiva que se inicia debe considerar el carácter temporal que, en ausencia de perturbaciones adicionales, tendrá el repunte de la inflación de los últimos meses».

El Banco de España atribuye en buena parte la importante subida de la inflación registrada el pasado año al incremento del IVA, los impuestos del tabaco, la luz y el gas, factores que, en su opinión, tienen un efecto directo significativo sobre el nivel de precios y sobre la tasa de inflación, pero que, en ausencia de una transmisión hacia otros, desaparecerán de la tasa interanual de inflación del año próximo.

Ayer, el Gobierno siguió ofreciendo argumentos para refutar el planteamiento de Merkel. El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, recordó que los salarios en España se negocian desde hace tiempo en los convenios colectivos teniendo en cuenta la inflación prevista e incorporando además el crecimiento de la productividad. Momentos antes de participar en un acto del PSOE en la localidad malagueña de Antequera, Gómez declaró a los periodistas que la incorporación de la productividad en los convenios colectivos se hace desde hace tiempo como una norma, que no sólo se da en España, sino también en otros países europeos.
Gómez recalcó que los convenios colectivos tienen dos tipos de orientación, tanto el aumento de los precios, como la productividad, fórmulas que se incorporan a los convenios colectivos, según informa Efe.

Por su parte, el vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, manifestó que «no ayuda» nada para conseguir una reforma de la negociación colectiva que el Gobierno diga a los agentes sociales lo que tienen que hacer. Además, añadió que en el acuerdo social firmado hay «puntos muy interesantes» respecto a la reforma de la negociación colectiva.